El Alto Representante de la UE llama a la transparencia total en los resultados electorales y acusa al gobierno de Maduro de jugar con fuego al seguir reprimiendo a la oposición.
Josep Borrell, el Alto Representante para Asuntos Exteriores de la Unión Europea, ha exigido sin rodeos que el Consejo Nacional Electoral (CNE) «muestre las cartas» y acabe con el juego de sombras que mantiene al país en una crisis interminable. Borrell advirtió que la paciencia de la UE se está agotando: “No toleraremos más sombras en Venezuela”.
Desde su cuenta en la red social X, Borrell se dirigió directamente al régimen de Nicolás Maduro, llamando a la transparencia total en la divulgación de los resultados electorales. “La transparencia no es una opción, es una obligación”, subrayó, enviando un mensaje claro de que la opacidad en el manejo de las elecciones no será aceptada ni por la comunidad internacional ni por el pueblo venezolano.
Borrell, quien ha estado siguiendo de cerca los acontecimientos en Venezuela, dejó claro que la Unión Europea está en constante contacto con actores clave, incluido el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, y varios gobiernos latinoamericanos. En este sentido, respaldó con firmeza la mediación liderada por Brasil, Colombia y México, describiéndola como «clave» para evitar que la situación en Venezuela continúe desmoronándose.
Sin embargo, la exigencia de transparencia no fue el único golpe que Borrell lanzó. El diplomático europeo también acusó al régimen de Maduro de “jugar con fuego” al continuar con la represión contra la oposición y la sociedad civil. “Las detenciones arbitrarias y la represión deben cesar de inmediato”, declaró, dejando claro que las acciones del gobierno venezolano no están pasando desapercibidas y que están empujando al país hacia un aislamiento aún mayor en la arena internacional.
Todo indica que la falta de transparencia en los resultados electorales y las crecientes denuncias de violaciones de derechos humanos están erosionando la legitimidad del gobierno de Maduro a pasos agigantados. Borrell fue enfático: “El mundo está mirando, y las sombras no durarán para siempre”.