Volker Türk, alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, insta al gobierno venezolano a frenar legislaciones que podrían restringir derechos fundamentales y denuncia el aumento de detenciones arbitrarias tras las elecciones.
El alto comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk, ha lanzado una severa advertencia sobre la situación en Venezuela, manifestando su profunda preocupación por la posibilidad de que nuevas legislaciones puedan «socavar el espacio cívico y democrático» del país. En un comunicado emitido este martes, Türk expresó inquietud ante propuestas como el Proyecto de Ley sobre Supervisión de Organizaciones No Gubernamentales y el Proyecto de Ley contra el Fascismo, que podrían restringir aún más las libertades fundamentales en Venezuela.
“Es crucial que las autoridades se abstengan de implementar estas leyes para preservar la cohesión social y el futuro democrático de Venezuela”, declaró Türk, subrayando que la adopción de tales legislaciones podría tener consecuencias graves para la democracia y los derechos humanos en el país.
El alto comisionado también alertó sobre el aumento de las detenciones «arbitrarias» y el «uso desproporcionado de la fuerza» en el contexto post-electoral, señalando un preocupante incremento en la represión estatal desde el 29 de julio. Según Türk, más de 2.400 personas, incluidos manifestantes, defensores de derechos humanos, adolescentes y observadores electorales, han sido detenidas, en muchos casos sin garantías procesales básicas. “La mayoría de los casos documentados presentan serias irregularidades en los procesos, como la negativa a permitir la designación de defensores legales y el contacto con familiares, lo que podría calificar varios de estos casos como desapariciones forzadas», subrayó en su comunicado.
Además, Türk enfatizó la necesidad urgente de liberar a todas las personas detenidas arbitrariamente y garantizar un juicio justo a los detenidos, condenando enérgicamente el «uso desproporcionado de la fuerza por parte de las fuerzas de seguridad y los ataques a manifestantes por individuos armados que respaldan al Gobierno». A pesar de la situación tensa, el alto comisionado instó a la responsabilidad por actos de violencia perpetrados por algunos manifestantes contra funcionarios y edificios públicos, recordando que la violencia no es una solución.
Las tensiones han escalado aún más con la difusión de listas de personas buscadas por presuntos delitos, que incluyen a miembros de la oposición y periodistas, y con llamados de las autoridades a presentar denuncias contra quienes ejercen actividades legítimas en la vida cívica. Este ambiente de hostilidad y persecución ha encendido las alarmas en la comunidad internacional, que ahora enfrenta un momento decisivo en su respuesta a la crisis venezolana.
Finalmente, Volker Türk hizo un llamado a la comunidad internacional para promover un diálogo inclusivo centrado en los derechos humanos de todos los venezolanos, ofreciendo el respaldo de su Oficina para encontrar soluciones a la crisis de derechos humanos que vive el país.