La líder opositora cuestiona la idea de nuevas elecciones y subraya que la oposición ya ganó bajo condiciones adversas, llamando a la comunidad internacional a apoyar un cambio pacífico en Venezuela.
La líder opositora venezolana, María Corina Machado, ha rechazado tajantemente la reciente propuesta del presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, de repetir las elecciones en Venezuela como una solución a la crisis política del país. En una entrevista con CNN, Machado no solo cuestionó la viabilidad de tal sugerencia, sino que también puso en duda las intenciones detrás de la misma.
«Si vamos a una segunda elección y no le gusta el resultado a Maduro, ¿qué hacemos? ¿Vamos a una tercera, y después a una cuarta o una quinta hasta que le gusten los resultados a Maduro?», se preguntó retóricamente Machado, dejando claro que no considera viable seguir convocando elecciones hasta que el resultado sea aceptado por el régimen.
Machado argumentó que la situación en Venezuela es única y no puede compararse con la de otros países donde los gobiernos en el poder no están involucrados en actividades «criminales». «Este no es el caso de Venezuela», afirmó, subrayando la gravedad de las acusaciones que enfrenta el régimen de Nicolás Maduro.
La líder opositora destacó que la oposición ya participó en unas elecciones bajo condiciones adversas y que, según sus cifras, «ganó». Machado reveló que su equipo cuenta con el 84% de las actas, las cuales indican que el candidato opositor, Edmundo González, obtuvo 7 millones 300 mil votos, lo que describió como una «victoria monumental». A lo largo de la entrevista, Machado insistió en que Nicolás Maduro «ha perdido su legitimidad», no solo ante el pueblo, sino también dentro de las Fuerzas Armadas, y que la reciente proclamación de su victoria «no fue respaldada por un conteo transparente».
Machado hizo un llamado a la comunidad internacional para que apoye un «proceso pacífico de cambio en Venezuela», resaltando que el gobierno de Maduro se encuentra «más aislado que nunca». Agradeció al gobierno argentino por proteger a sus colaboradores y expresó su optimismo sobre la posibilidad de un nuevo liderazgo en Venezuela en un futuro cercano.
En cuanto a la postura de Chile, Machado agradeció al presidente Gabriel Boric por su apoyo y señaló que ha encontrado un respaldo significativo. «Chile ha demostrado que el conflicto en Venezuela no se trata de izquierdas y derechas», añadió, subrayando que la crisis venezolana ha trascendido las divisiones ideológicas tradicionales.