Washington desestima la validez del fallo del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela, reafirmando que Edmundo González es el verdadero ganador de las elecciones presidenciales del 28 de julio.
Estados Unidos emitió este viernes una declaración mordaz en respuesta a la sentencia del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) que ratifica la reelección de Nicolás Maduro. El portavoz adjunto del Departamento de Estado, Vedant Patel, no se anduvo con rodeos al calificar la decisión del TSJ como «carente de credibilidad», al tiempo que subrayó la «abrumadora evidencia» que apunta a Edmundo González como el verdadero ganador de las elecciones presidenciales del 28 de julio.
«Las actas electorales verificadas de forma independiente y disponibles públicamente muestran que los votantes venezolanos eligieron a Edmundo González como su futuro líder», afirmó Patel, poniendo en tela de juicio la legitimidad del proceso judicial y electoral en Venezuela. En un tono que refleja la creciente impaciencia de Washington, añadió: «Ahora es el momento de que los partidos venezolanos inicien conversaciones sobre una transición respetuosa y pacífica de conformidad con la ley electoral venezolana y los deseos del pueblo venezolano.»
El comunicado también tuvo palabras duras para la figura de Maduro, advirtiendo que «los intentos constantes de proclamar fraudulentamente la victoria de Maduro no harán más que exacerbar la crisis actual». Este mensaje refuerza la postura de Estados Unidos de no reconocer los resultados avalados por el TSJ, al que considera un brazo más del régimen.
Por otro lado, Washington hizo un llamado a la liberación inmediata de los detenidos «por ejercer su derecho a la libre expresión», dejando claro que el respeto a los derechos humanos sigue siendo un punto central en su política hacia Venezuela. «Estados Unidos y la comunidad internacional seguirán defendiendo a los votantes venezolanos, cuya voluntad y derechos se han visto continuamente socavados desde el 28 de julio», subrayó el comunicado.
Más temprano, Estados Unidos se sumó a un coro de naciones latinoamericanas que rechazaron el fallo del TSJ, instando a la publicación de las actas de votación de manera «íntegra y verificable». En un comunicado conjunto, los países firmantes expresaron que «solo una auditoría imparcial e independiente de los votos» garantizará el respeto a la voluntad popular en Venezuela.
La declaración fue tajante en su exigencia de transparencia: «Nuestros países ya habían manifestado el desconocimiento de la validez de la declaración del CNE, luego de que se impidió acceso a los representantes de la oposición al conteo oficial, la no publicación de las actas y la posterior negativa a realizar una auditoría imparcial e independiente de todas ellas.»
El mensaje de Estados Unidos concluyó reiterando su disposición para apoyar un proceso “inclusivo, liderado por los venezolanos, para restablecer las normas democráticas”.