La OTAN aumenta las medidas de seguridad en su base en Alemania, enviando a casa a empleados no esenciales tras una alerta de inteligencia que señala una «amenaza potencial».
La OTAN ha elevado el nivel de seguridad en su base aérea de Geilenkirchen, ubicada en el oeste de Alemania, debido a una «amenaza potencial» que fue detectada gracias a información proveniente de los servicios de inteligencia. Este incremento en las medidas de seguridad llevó a la intervención policial este viernes (23 de agosto de 2024) y a la evacuación de todo el personal no esencial como medida preventiva.
En un comunicado publicado en la red social X el jueves, la OTAN explicó que la decisión fue tomada en respuesta a la información recibida por parte de sus servicios de inteligencia. «La seguridad de nuestro personal es nuestra prioridad absoluta. Las operaciones continúan según lo previsto», aseguró la organización, subrayando que las actividades en la base no se han visto interrumpidas, a pesar de la amenaza.
La base aérea de Geilenkirchen ha sido operada por la OTAN desde 1980 y es conocida por albergar aviones de reconocimiento Awacs, que juegan un papel crucial en las misiones de vigilancia y control aéreo de la alianza.
Este anuncio llega poco más de una semana después de que otra base militar en Alemania, ubicada en Colonia, fuera cerrada temporalmente debido a sospechas de un sabotaje en su suministro de agua. Aunque la OTAN también reportó un «intento de intrusión» en la base de Geilenkirchen, no se ha establecido ninguna conexión directa entre los dos incidentes.
La OTAN ha emitido repetidas advertencias sobre una campaña de actividades hostiles que, según la alianza, está siendo organizada por Rusia. Estas actividades incluyen actos de sabotaje y ciberataques dirigidos contra infraestructuras críticas de los países miembros.