El Secretario General de la OEA denuncia la citación de González Urrutia como una jugada represiva, mientras el líder opositor desafía al poder chavista y reclama una verificación internacional de las actas electorales.
Luis Almagro, Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), ha lanzado un fuerte reproche contra el régimen de Nicolás Maduro. Almagro calificó la reciente citación de Edmundo González Urrutia por parte de la Fiscalía venezolana como «persecución política pura y dura», en un claro desafío al sistema madurista que, según Almagro, utiliza la justicia como herramienta de represión.
«Repudio y condeno la ‘citación’ del fiscal general de Venezuela a Edmundo González Urrutia para declarar sobre supuestos delitos», escribió Almagro en X, la red social antes conocida como Twitter. «Dicha citación no ofrece garantías, es propia de su actuación caracterizada por la persecución política y la violación sistemática de DDHH».
El líder opositor, que se ha proclamado vencedor de las elecciones presidenciales del 28 de julio, debía presentarse este lunes ante el Ministerio Público. Sin embargo, en un clima de creciente hostilidad y con vehículos del SEBIN rondando la zona, González Urrutia decidió no comparecer. La fiscalía, lejos de retroceder, emitió una segunda citación para este martes, elevando aún más la tensión.
González Urrutia, quien ha estado escondido desde las elecciones bajo amenaza de arresto, se mostró desafiante en un video publicado poco antes de la citación. «El Ministerio Público pretende someterme a una entrevista sin que se precise en qué condición se espera que comparezca y precalificando delitos no cometidos», denunció. No es la primera vez que el opositor acusa al fiscal general Tarek William Saab de actuar como un «acusador político», condenando por anticipado y promoviendo citaciones sin garantías de independencia ni debido proceso.
La controversia no se detiene ahí. Según la oposición y varios observadores internacionales independientes, el triunfo de González Urrutia en las elecciones fue claro y contundente, una realidad que el madurismo se niega a aceptar. El propio González ha instado a Maduro a reconocer la verdadera solución: «la verificación internacional, independiente y confiable de las actas» electorales. En sus palabras, «la verdad de lo sucedido el 28 de julio es lo que salvará la institucionalidad democrática».
Pero la represión continúa, y Venezuela sigue sumida en una espiral de incertidumbre y desasosiego. «Venezuela vive horas de incertidumbre y desasosiego, producto del empeño de ustedes de violar la voluntad de cambio», sentenció González Urrutia, al tiempo que exigió el respeto a «la voluntad popular expresada en las elecciones del 28 de julio que favorecieron, ampliamente, el cambio político que representó» su candidatura.