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OEA llama a una sesión urgente sobre el Caso Venezuela

Con más de 1.500 detenciones y un periodista desaparecido, la CIDH expondrá la gravedad de la crisis post-electoral en Venezuela ante la OEA.

La Organización de Estados Americanos (OEA) ha encendido las alarmas al convocar una sesión extraordinaria para este miércoles, 28 de agosto, con el único punto en agenda: la grave situación que atraviesa Venezuela después de las elecciones del 28 de julio. A petición de las Misiones Permanentes de once países, entre ellos Argentina, Canadá y Estados Unidos, los Estados Miembros se reunirán en el salón Simón Bolívar de la sede de la OEA en Washington, D.C., para escuchar de primera mano el informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) sobre las violaciones que se han intensificado en el país sudamericano.

No se trata de una reunión ordinaria. La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión (RELE) de la CIDH ha documentado un incremento alarmante en la represión: más de 1.500 detenciones desde el día de las elecciones, que incluyen a activistas, defensores de derechos humanos y, de manera especialmente preocupante, a periodistas. Entre los casos más críticos se encuentra el del periodista Roland Carreño, detenido el 2 de agosto por el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), sin que hasta la fecha se haya confirmado su paradero. La CIDH ha otorgado medidas cautelares en su caso, catalogando la situación como «urgente» debido al riesgo de «daño irreparable a sus derechos».

La RELE no se ha guardado nada al exponer la situación: las detenciones se realizan bajo la “Ley Contra el Odio”, en un contexto que «limita severamente las garantías judiciales y el derecho de defensa». Los cargos presentados contra los detenidos, que incluyen terrorismo e instigación al odio, a menudo se basan en «pruebas manipuladas o fabricadas», subraya el informe. A medida que se intensifica la crisis, la censura se ha expandido a todos los rincones, incluyendo el ámbito digital, con más de 100 sitios web bloqueados, muchos de ellos relacionados con derechos humanos y medios de comunicación.