El periodista destaca el papel clave de EE.UU. y la necesidad de presión internacional para que se respete la voluntad popular en Venezuela.
El periodista y columnista Francisco Poleo ha afirmado que las sanciones individuales impuestas por el gobierno de Estados Unidos contra 16 funcionarios aliados de Nicolás Maduro representan solo el comienzo de un proceso más amplio. Según Poleo, este movimiento es el «abrebocas de lo que viene» en un esfuerzo internacional para presionar al régimen venezolano a reconocer la voluntad popular.
Durante su participación en el programa La Entrevista con Miguel Ángel Rodríguez, Poleo destacó que las sanciones más efectivas son aquellas dirigidas de forma personalizada contra actores clave del régimen. «A eso es lo que debe volver cualquier administración de EE.UU.», afirmó, subrayando la necesidad de un trabajo de inteligencia para aplicar las sanciones de manera estratégica.
Poleo también considera que la combinación de factores internacionales será clave para fomentar un cambio en Venezuela, destacando que el papel de España será fundamental. En sus declaraciones, Poleo explicó que Venezuela está entrando en una segunda fase del plan post-electoral, en la que se busca forzar el reconocimiento de los resultados de las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024.
El periodista comparó la situación venezolana con lo ocurrido recientemente en Guatemala, donde las instituciones del Estado intentaron desconocer la voluntad popular tras unas elecciones, pero la presión internacional logró que el Congreso reconociera al candidato ganador. Poleo señaló que en Venezuela se está intentando crear un cerco internacional para garantizar que los poderes del Estado respeten los resultados.
Según Poleo, la determinación internacional de estabilizar Venezuela está motivada por temas como la migración y el petróleo. «No puede haber estabilidad en un país donde un candidato gana con el 70% de los votos y no se le reconoce», advirtió, aludiendo a la determinación de EE.UU. en este asunto.
El periodista también señaló que uno de los principales obstáculos es Diosdado Cabello, a quien describió como un actor clave dentro del régimen. «Su nombramiento como ministro de Interior no fue un premio, lo están poniendo directamente en la línea de mando», comentó Poleo, sugiriendo que esta posición lo expone ante la Corte Penal Internacional.
En sus conclusiones, Poleo resaltó que la influencia de Cabello dentro del régimen es bien conocida, a pesar de no haber ostentado un cargo oficial durante mucho tiempo. «Todo el mundo sabía en Venezuela que era el número dos y que actuaba sin filtros», agregó.