El venezolano se convierte en el primer jugador en la historia en ganar títulos de bateo con tres equipos diferentes, tras una temporada destacada con los Padres.
Otra temporada, otro equipo y otro título de bateo para el venezolano Luis Arráez. El doblete que conectó en el sexto inning del último juego de la temporada regular prácticamente aseguró que Arráez se consagre nuevamente como el líder de bateo de la Liga Nacional, esta vez con un promedio de .314.
Con este logro, Arráez frustró la posibilidad de que Shohei Ohtani de los Dodgers consiguiera la Triple Corona, ya que el japonés terminó la temporada con un promedio de .310, y su más cercano perseguidor, Marcell Ozuna, quedó con .304. Ohtani lideró la Liga Nacional en jonrones y carreras impulsadas, pero el título de bateo se le escapó gracias a la consistencia de Arráez.
“Esto es especial para mí”, dijo Arráez tras el juego. “Estoy aquí para jugar béisbol y ayudar a mi equipo a ganar. Creo que lo logré”.
El venezolano, ya había ganado títulos de bateo con los Mellizos en 2022 y con los Marlins en 2023.
Arráez concluyó la temporada con exactamente 200 hits en 637 turnos al bate, consolidándose como un pilar en la ofensiva de los Padres de San Diego desde su llegada en mayo. La influencia de Arráez fue clave para que el equipo asegurara su lugar en la postemporada, siendo llamado al Juego de Estrellas a pesar de haber lidiado con lesiones en el pulgar y la rodilla izquierda.
«Amo San Diego,» expresó Arráez al finalizar la temporada. «Me abrieron las puertas. Siento que esto es una familia aquí».