Rawhi Mushtaha, líder del buró político de Hamás, fue abatido en un ataque que también mató a otros dos altos cargos, según el Ejército israelí.
Este jueves, las Fuerzas de Defensa de Israel anunciaron la muerte de Rawhi Mushtaha, miembro del buró político de Hamás y considerado el «jefe del Gobierno» del grupo islamista en la Franja de Gaza. Según el Ejército, Mushtaha fue abatido hace tres meses en un ataque aéreo que tuvo lugar en un complejo subterráneo en el norte de Gaza. Este centro servía como un «centro de control y mando» para el grupo, permitiendo a sus líderes mantenerse escondidos durante largos periodos de tiempo.
Además de Mushtaha, en el ataque murieron Sameh al Siraj, responsable de seguridad en el buró político de Hamás, y Sami Oudeh, comandante del Mecanismo de Seguridad General, encargado de la policía interna. Israel acusó a Hamás de no anunciar las muertes de sus altos cargos para evitar afectar la moral de sus combatientes.
El rol de Mushtaha en Hamás
El Ejército israelí describió a Mushtaha como una figura clave en las decisiones militares del grupo y lo calificó como la «mano derecha» de Yahya Sinwar, líder de Hamás en Gaza y presunto cerebro detrás de los ataques del 7 de octubre. «Mushtaha era considerado la figura de mayor envergadura en el buró político de Hamás en la Franja de Gaza», aseguró el comunicado militar, añadiendo que mantuvo el control civil del régimen de Hamás mientras participaba en actividades terroristas contra Israel.
Escalada en Gaza y Siria
Mientras tanto, el Ministerio de Salud de Gaza informó de un nuevo balance de víctimas desde el inicio del conflicto el pasado 7 de octubre, contabilizando 41.788 muertos y 96.794 heridos. En las últimas 24 horas, 99 personas perdieron la vida en la Franja, según los datos del ministerio.
En paralelo, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) reportó la muerte de cuatro personas en un ataque aéreo israelí en Damasco, entre ellas Hasán Jafar al Qasir, yerno del fallecido jefe de Hezbolá, Hasan Nasralá. El ataque ocurrió en el barrio de Mazzé, en un apartamento frecuentado por dirigentes de Hezbolá y los Guardianes de la Revolución iraní.
Nasralá murió en otro bombardeo israelí el 27 de septiembre, en un suburbio de Beirut, lo que intensificó la tensión en la región. Israel también confirmó la muerte de Jafar al Qasir, hermano de Hasán Jafar al Qasir y responsable del traslado de armas de Irán hacia Líbano.