Un piloto de Turkish Airlines falleció durante un vuelo desde Seattle a Estambul, forzando un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto JFK de Nueva York.
Un vuelo de Turkish Airlines tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia en Nueva York después de que uno de sus pilotos falleciera en pleno vuelo. El Airbus 350-900, que cubría la ruta entre Seattle y Estambul, aterrizó de manera segura en el aeropuerto John F. Kennedy (JFK) tres horas después de que el piloto se desplomara, según informó este miércoles la aerolínea turca.
El portavoz de la aerolínea, Yahya Ustun, compartió los detalles del incidente en la red social X. El vuelo TK204 había despegado el martes por la noche desde Seattle, en el noroeste de Estados Unidos, cuando uno de los pilotos, de 59 años, colapsó inesperadamente. «La tripulación trató sin éxito de reanimarlo», explicó Ustun, pero lamentablemente el piloto falleció antes de que pudieran aterrizar.
El piloto, que había trabajado para Turkish Airlines desde 2007, se había sometido a un examen médico en marzo de este año, el cual no arrojó indicios de problemas de salud, según la aerolínea.
El aterrizaje de emergencia se llevó a cabo sin incidentes adicionales, con el copiloto y otro piloto dirigiendo la aeronave al aeropuerto JFK. El medio especializado AirLive reportó que la emergencia médica ocurrió tres horas antes del aterrizaje en Nueva York.
Este trágico evento destaca la importancia de las medidas de seguridad y protocolos en vuelo, los cuales permitieron que el avión aterrizara de manera segura sin poner en riesgo a los pasajeros. Turkish Airlines no ha proporcionado más detalles sobre las causas del fallecimiento del piloto, pero el incidente ha generado conmoción en la comunidad de la aviación.