El piloto español llevó su moto con mucho temple y sin apenas sustos, consciente de que tenía que terminar entre las nueve primeras posiciones para ser campeón.
El español Jorge Martín se adjudicó este domingo 17 de noviembre el título mundial de MotoGP en la última carrera de la temporada en el Gran Premio Solidaridad, disputado en el circuito de Montmeló, cerca de Barcelona, y ganado por el italiano Francesco Bagnaia por delante de Marc Márquez y el nuevo campeón, que fue tercero.
El italiano, que hace tres meses lideraba la clasificación general, fue segundo en el mundial, seguido de su compatriota E. Bastianini.
Bajo una tensión máxima, el piloto madrileño llevó su moto con mucho temple y sin apenas sustos, consciente de que tenía que terminar entre las nueve primeras posiciones. Con este triunfo, Martín, que ya fue campeón de Moto3 en 2018, se convirtió en el quinto español en subir al trono de la categoría reina del motociclismo de velocidad. Es, además, el primer campeón del mundo desde una escudería satélite: Prima Pramac Racing (aunque conduciendo una Ducati Desmosedici).
La pelea por la cuarta plaza entre Aleix Espargaró y Álex Márquez fue lo más emocionante de las vueltas finales, en un tira y afloja entre ambos, casi siempre con el de Aprilia por delante, pero que acabó decantándose de parte del pequeño de los hermanos Márquez.
En su cuarta temporada en la categoría reina, la ‘explosividad’ de Jorge Martín y, sobre todo, su regularidad, con apenas fallos a lo largo de la temporada, en la que ha conseguido siete triunfos en las carreras ‘sprint’ y tres en grandes premios, le han permitido hacer historia con el Prima Pramac Racing, la primera escudería campeona del mundo frente a las siempre ‘omnipresentes’ y potentes fábricas de MotoGP.