Según el gobierno venezolano, la alerta de viaje de EE. UU. “no busca proteger a nadie”, sino que es una “herramienta de guerra psicológica y desinformación”.
El Gobierno de Venezuela rechazó este lunes la alerta de viaje emitida por el Departamento de Estado de Estados Unidos, y la calificó como un “acto hostil cargado de cinismo, racismo y propaganda política” que, según afirma, “busca alimentar la campaña de agresión permanente contra nuestro país”.
“Mientras intenta desacreditar a Venezuela con acusaciones infundadas, es el propio gobierno estadounidense quien secuestra, encarcela y desaparece a migrantes, incluidos niños venezolanos como Maikelys Antonella Espinoza Bernal, retenida en su frontera sur sin justificación ni respuesta oficial, con el claro objetivo de utilizarla como rehén política en favor de la ultraderecha venezolana”, señala el comunicado publicado por el canciller Yván Gil en Telegram.
Según Miraflores, Estados Unidos “carece de autoridad moral para hablar de derechos humanos”. “Las imágenes de niños en jaulas, madres separadas de sus hijos, deportaciones arbitrarias y centros de detención que recuerdan campos de concentración siguen estremeciendo el mundo”, añade.
“A ellos se suman leyes racistas, brutalidad policial y crímenes contra trabajadores venezolanos, como los secuestrados en El Salvador, sometidos a tratos inhumanos”, prosigue el texto.
La administración oficialista sostiene que la alerta de viaje de EE. UU. “no busca proteger a nadie”, sino que es una “herramienta de guerra psicológica y desinformación, parte del libreto intervencionista de Washington y sus lacayos locales”.
“Venezuela es un país de paz. Quienes deseen visitarnos con respeto y espíritu de hermandad encontrarán siempre abiertas las puertas de un pueblo digno, soberano y en revolución”, concluye el comunicado.
Con información de elcooperante.com