Vsevolod Kniaziev, el presidente del Tribunal Supremo de Ucrania, fue detenido el 16 de mayo de 2023 por cargos de corrupción. Se acusa a Kniaziev de aceptar sobornos a cambio de fallos favorables en casos judiciales.
Kniaziev fue detenido por la Oficina Nacional Anticorrupción de Ucrania (NABU) y la Fiscalía Especializada en Delitos de Corrupción (SAP). NABU y SAP afirmaron que habían estado investigando a Kniaziev durante varios meses y que habían reunido pruebas de su corrupción.
Kniaziev ha negado los cargos en su contra. Ha afirmado que es inocente y que está siendo incriminado.
La detención de Kniaziev es un acontecimiento importante en la lucha contra la corrupción en Ucrania. Kniaziev era una de las figuras más poderosas en el sistema judicial ucraniano, y su arresto envía un mensaje claro de que nadie está por encima de la ley.
Aún está por verse si Kniaziev será declarado culpable de los cargos en su contra. Sin embargo, su arresto es una señal de que los esfuerzos anticorrupción en Ucrania están dando resultados.