MILITARES

Polonia no ve impensable enviar tropas de la OTAN a Ucrania

Polonia y Francia abren el debate sobre el apoyo militar directo en Ucrania, enfrentando la creciente presión sobre Europa ante el avance ruso.

En un momento de creciente tensión en el continente europeo, las declaraciones del ministro de Exteriores de Polonia, Radek Sikorski, abren una nueva ventana en el debate sobre el apoyo militar a Ucrania. Durante una discusión en el parlamento polaco, con motivo del 25° aniversario de la adhesión de Polonia a la OTAN, Sikorski destacó que la presencia de fuerzas de la OTAN en Ucrania «no es impensable», agradeciendo al presidente francés, Emmanuel Macron, por mantener abierta esa posibilidad.

Estas observaciones reflejan el intenso debate europeo sobre cómo auxiliar a Ucrania frente a un momento en que Rusia parece ganar ímpetu en el campo de batalla y las reservas de munición de Kyiv se agotan. Con el Congreso de EE.UU. reteniendo la ayuda que Ucrania afirma necesitar críticamente para resistir a los rusos, Europa se enfrenta a la presión de responder a un conflicto que ha roto la paz en el continente.

La posibilidad de que tropas occidentales sean enviadas a Ucrania, sugerida por Macron el mes pasado, rompió un tabú entre los aliados y provocó reacciones diversas entre los líderes europeos. Aunque oficiales franceses matizaron posteriormente las declaraciones de Macron, insistieron en la necesidad de enviar una señal clara a Rusia de que no puede ganar su guerra en Ucrania.

El Kremlin ha advertido que el envío de tropas de combate de la OTAN resultaría inevitablemente en un conflicto directo con Rusia, con el presidente Vladimir Putin sugiriendo que tal movimiento arriesgaría un conflicto nuclear global.

Inicialmente, líderes europeos como el primer ministro polaco, Donald Tusk, descartaron la idea de enviar tropas a Ucrania tras las observaciones de Macron. Sin embargo, Sikorski cambió el tono menos de dos semanas después, indicando que la presencia de fuerzas de la OTAN en Ucrania es una posibilidad a considerar y que la iniciativa de Macron es valiosa porque «se trata de que Putin tenga miedo, no de que nosotros tengamos miedo de Putin».

Este cambio de postura sugiere una alineación con la posición de Macron y subraya la complejidad del dilema europeo: observar cómo Ucrania podría quedarse sin munición o intervenir más directamente en su apoyo. Con una visita planificada de los líderes polacos a Washington, Polonia espera motivar a Estados Unidos a incrementar su ayuda a Ucrania, en un esfuerzo por fortalecer la resistencia ucraniana y asegurar la estabilidad regional ante la amenaza rusa.