El secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, busca apoyo regional para un alto al fuego y la entrega de ayuda humanitaria en Gaza.
El secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, instó este lunes a los países de Oriente Medio a presionar al grupo terrorista palestino Hamás para que acepte una tregua con Israel en Gaza. «Mi mensaje para los gobiernos en la región (…) es que si quieren un cese el fuego, presionen a Hamás para que diga que sí», declaró Blinken a los periodistas en El Cairo. «En cuanto a los civiles, la única manera de garantizar que no haya más bajas es el alto al fuego y la aceptación de Hamás», añadió antes de partir hacia Israel en una gira regional para intensificar la presión por una tregua en la Franja de Gaza.
El presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi, recibió a Blinken en El Cairo en una reunión donde ambos se comprometieron a redoblar esfuerzos para alcanzar «un alto al fuego en la Franja de Gaza e intercambiar rehenes y prisioneros», según un comunicado de la Presidencia egipcia. En la reunión también se discutieron los esfuerzos de Egipto para entregar ayuda humanitaria al enclave palestino y la «importancia» de eliminar «los obstáculos a la entrega de ayuda».
Mañana, martes, se celebrará en el Mar Muerto, en Jordania, una conferencia humanitaria organizada por Jordania, las Naciones Unidas y Egipto, con el objetivo de establecer un plan urgente de respuesta humanitaria. Se espera la participación de más de 70 países y organismos internacionales. Blinken valoró los esfuerzos de Egipto, destacando su rol político y humanitario en el conflicto, así como «la voluntad de continuar el trabajo conjunto y la coordinación entre ambos países para restablecer la paz y la seguridad en la región», se lee en la nota oficial.
La gira de Blinken, que incluye visitas a Israel, Jordania y Qatar, tiene como objetivo presionar a las partes para que acepten la propuesta de cese al fuego anunciada por el presidente de EE.UU., Joe Biden, a finales de mayo. La propuesta incluye un cese al fuego, el intercambio de rehenes israelíes por prisioneros palestinos, una retirada gradual de las tropas israelíes de Gaza y la implementación de un plan de reconstrucción del enclave palestino.