AI nombra «preso de conciencia» al activista Pedro Albert Sánchez y exige su liberación inmediata junto a otros detenidos injustamente.
Este lunes, Amnistía Internacional (AI) instó al Gobierno de Cuba a liberar a las personas injustamente encarceladas y eliminar leyes represivas contra la población, nombrando «preso de conciencia» al profesor y activista Pedro Albert Sánchez, quien ha sido detenido en múltiples ocasiones desde 2020.
En un comunicado publicado con motivo del aniversario de las manifestaciones de julio de 2021, en las que «al menos 671 personas permanecen en prisión», AI exigió al presidente cubano Miguel Díaz-Canel la liberación inmediata e incondicional de Sánchez. La organización recordó que diversas entidades, como Justicia 11J, Prisoners Defenders y el Observatorio Cubano de Derechos Humanos, han documentado entre 963 y 1113 detenciones por razones políticas en los últimos tres años.
Amnistía Internacional también demanda la liberación de otros presos de conciencia, como José Daniel Ferrer García, líder opositor; los artistas Luis Manuel Otero Alcántara y Maykel Osorbo; y los sacerdotes yorubas Loreto Hernández García y Donaida Pérez Paseiro.
Pedro Albert Sánchez, de 68 años, es conocido por su crítica al gobierno cubano y su defensa de la libertad de expresión y reunión pacífica. Fue detenido múltiples veces desde 2020 por participar en protestas pacíficas y expresar opiniones disidentes. Su participación en las marchas del 11 de julio de 2021 le valió cargos de «desacato» y «desórdenes públicos», por los que fue condenado a cinco años de prisión. Desde noviembre de 2023, Sánchez se encuentra encarcelado bajo duras condiciones que han deteriorado su salud, ya que sufre de cáncer y otras enfermedades.
AI ha emitido una acción urgente motivando a personas de todo el mundo a exigir al presidente de Cuba la liberación de Sánchez.
Además, AI asevera que el Estado cubano debe cesar la represión sistemática contra activistas, artistas, familiares de presos políticos, intelectuales y periodistas, y derogar artículos del Código Penal que criminalizan la disidencia y violan el derecho a la libertad de expresión.
«Es inaceptable que las autoridades cubanas continúen utilizando tácticas represivas para silenciar a quienes se atreven a alzar la voz en defensa de sus derechos humanos. Esta represión constante para intentar sofocar cualquier forma de disidencia debe detenerse de una vez por todas», afirmó Ana Piquer, directora para las Américas de Amnistía Internacional.
La organización subraya que la situación de derechos humanos en Cuba se sigue deteriorando, con un incremento en la represión y la criminalización de la disidencia. También denuncia las tácticas represivas por parte de las autoridades, que incluyen criminalización, detenciones arbitrarias, detenciones domiciliarias de facto, hostigamiento, citaciones y sanciones administrativas contra activistas, periodistas y defensores de derechos humanos, así como cortes de internet en locaciones donde se ubican protestas espontáneas.