El equipo de campaña de Trump afirma que pandilleros venezolanos se han infiltrado en el país y responsabiliza a Kamala Harris de la situación fronteriza.
El equipo de campaña de Donald Trump afirmó este martes que “miles” de miembros del Tren de Aragua, una organización criminal venezolana con presencia en toda Suramérica, ya se han infiltrado en territorio estadounidense. La campaña basa sus afirmaciones en un supuesto documento del jefe de inteligencia del Departamento de Seguridad Nacional, citado por el diario The New York Post.
Según el comunicado, estos pandilleros que han cruzado la frontera y se encuentran en suelo estadounidense “tienen licencia para empezar a matar a policías”, asegurando que “los asesinatos ya han empezado y se van a poner peor”. La campaña de Trump sostiene que estos delincuentes “se hacen pasar por solicitantes de asilo” para entrar al país, cuando en realidad serían presidiarios “exportados” por Venezuela.
El equipo de Trump no solo apunta a la peligrosidad de estos individuos, sino que también dirige sus críticas hacia la candidata demócrata Kamala Harris. La acusan de haber entregado “el control total de la frontera sur a carteles y terroristas”, culpándola de la violencia que, según ellos, ya ha comenzado en Estados Unidos. “Kamala Harris tiene las manos manchadas de sangre de incontables estadounidenses”, afirman en el comunicado.
Además, la campaña de Trump sugiere que Harris ha permitido la entrada intencionada de millones de inmigrantes con el objetivo de convertirlos en futuros votantes demócratas, a pesar de que el proceso para que un inmigrante se convierta en ciudadano y obtenga el derecho al voto puede tardar muchos años.
Estas acusaciones reflejan el tono alarmista y las preocupaciones de seguridad que han caracterizado la retórica de la campaña de Trump, especialmente en temas relacionados con la inmigración y la política fronteriza.