Argentina confirmó oficialmente que en el año 2016 la inflación fue de 41% en Buenos Aires y, por consiguiente, marcó tendencia en todo el país. Este período corresponde al primer año de Mauricio Macri al mando.
Sin embargo, esta no es la peor inflación que ha enfrentado el país: en el año 2002, tras una devaluación del 300% la inflación marcó 41%, la misma que en la actualidad. Además, en el año 1991 alcanzó un 84%, según el periódico español El País.
Los aumentos frenaron para el mes de diciembre, por lo que el gobierno de Macri confía en que la economía mejore para el 2017. De hecho, el medio español sostiene que el ejecutivo argentino consideraría un gran éxito si la inflación se registra a 20% para este año.
Los trabajadores con sindicatos fuertes como camioneros, petroleros y profesores tienen un aumento por encima del 30%, pero la población que vive en la economía informal, que supera el 35%, tiene dificultad para lograr aumentos de sus salarios.
Cabe destacar que de la región solo Venezuela supera los datos argentinos.