Este jueves la Contraloría General de la República llevó a cabo un acto oral y público sobre el gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles, y otros ocho funcionarios de la gobernación.
La audiencia fue dirigida únicamente a los imputados, representantes legales y personal de la Contraloría, informó el ente del Poder Ciudadano. «Como garantía de transparencia y objetividad» en el acto oral participó el contralor general, Manuel Galindo, y el director general de la Dirección de Procedimientos Especiales, Antonio Meneses, destacó la entidad.
Inicialmente la audiencia fue convocada como pública pero posteriormente se dictó que fuera «cerrada y reservada», lo que va en contra de la ley, criticó el abogado defensor, Rafael Chavero,
En horas de la tarde se conocerá si Capriles tiene o no responsabilidad política, y si los funcionarios públicos serán multados.
«Luego de que se haga firme la decisión y en caso de determinar la responsabilidad política, podrían inhabilitar a los funcionarios en un plazo de 05 días».
Por otra parte, el gobernador regional anunció que ya tiene conocimiento de la decisión de la audiencia, la cual se realizó por creer que está vinculado con la constructora brasileña Odebrecht, a partir de allí aseguró que «luchará» por el país en el marco de la Constitución.
Capriles explicó que el proceso es irregular pero a pesar de ello fue representado por su abogado (Chavero). Por su parte, decidió no hacer acto de presencia pues en su opinión es un «circo privado».
El proceso administrativo que se lleva contra el gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles Radonski, no tiene relación con la empresa brasileña Odebrecht, afirmó el contralor del República, Manuel Galindo, horas más tarde.
De esa manera, Galindo mencionó que los procedimientos vienen dados por las auditorías realizadas en 2012 y 2015 en el estado Miranda por la contraloría estatal.
En este aspecto informó que la decisión se dará a conocer públicamente una vez se se finiquite la investigación. De igual manera, requirió a los involucrados «el respeto máximo a los directores generales delegados».