El líder de Podemos y opción a candidato a la presidencia española en caso de que la moción de censura contra Rajoy se apruebe, Pablo Iglesias, buscará mostrar una imagen mucho más presidenciable el en debate de la moción este martes.
Al no contar con los números necesarios para aprobar la moción propuesta por Podemos, Iglesias jugará una nueva carta mostrándose como un estadista con un «proyecto de país» que comprende medidas anticorrupción, inspirado en el Gobierno de Portugal.
Esto sucede puesto que el partido izquierdista teme las maniobras que el Partido Popular (PP) pueda tener bajo la manga, por lo que no dan por ganado el debate de la moción.
Iglesias se esforzará por demostrar que el puesto de presidente es ideal para él, al aparecer con una imagen de líder distinto y maduro, centrándose en explicar un programa mucho más amplio que el que su partido ha venido manejando, que apele a amplios sectores de la sociedad.
El peso del programa se encuentra en la serie de medidas que presenta en contra de la corrupción, además de una ley contra las llamadas puertas giratorias, pero también habrá iniciativas inspiradas en las del Gobierno portugués y un importante peso del tema «Cataluña».
Hasta los momentos, Iglesias solo tiene 80 votos a favor, que representan el 23% de los diputados del Parlamento, a 96 escaños de la mayoría absoluta que requiere la iniciativa para salir adelante. Esto quiere decir que Podemos está en minoría, por lo que el desafío es sacar provecho al debate, o al menos no perderlo.