Este martes se reunieron en Moscú, los presidentes de China, Xi Jinping y Rusia, Vladimir Putin, donde instaron a Corea del Norte a instaurar una «moratoria» sobre sus pruebas nucleares y lanzamientos de misiles, a su vez acordaron promover una iniciativa común para arreglar el conflicto coreano, que incluye la congelación del programa armamentístico de Corea del Norte y las maniobras de gran escala de EEUU y Corea del Sur.
En un comunicado en común realizado por los ministerios de Relaciones Exteriores de ambos países «piden a todas las partes moderación y renunciar a los actos provocadores y a la retórica guerrera».
«Paralelamente a eso, las partes deberían iniciar negociaciones y afirmar los principios generales de sus relaciones, incluida la prohibición del uso de la fuerza, el rechazo a la agresión y la coexistencia pacífica» explicó el comunicado.
Hicieron mención al despliegue de escudos anti-misiles norteamericanos, ubicados en la región del sureste de Asia e insistieron que «representa un grave perjuicio para los intereses de seguridad estratégica de los países de la región, incluidos Rusia y China».
«Las preocupaciones de Corea del Norte deben ser respetadas. Otros países deben realizar esfuerzos para la reanudación de las negociaciones, crear conjuntamente una atmósfera de paz y de confianza mutua», expresaron.
Este martes Corea del Norte anunció el lanzamiento del primer misil balístico intercontinental. Moscú y Pekín expresaron «su profunda preocupación por el anuncio del lanzamiento», que consideran un hecho «inadmisible», puesto que se contradice con las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.