Histórico, sin lugar a dudas, fue el acto realizado por la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) el pasado lunes 3 de julio en el Teatro Chacao de Caracas. Fue un encuentro de monolítica unidad y de compromiso con todos los venezolanos, donde se dieron a conocer las propuestas y los lineamientos de acción que conduzcan al restablecimiento del orden democrático en el país y al cambio de un fracasado gobierno.
En el evento se firmó el Acuerdo de la Sociedad para Avanzar en el Rescate de la Democracia y la Constitución. Aparte de los dirigentes de la MUD estuvieron presentes agrupaciones y personas de la sociedad civil venezolana, representadas en independientes, del Consejo Nacional Evangélico, del Frente Institucional Militar, Defensores Populares, Fuerza Liberal, Gente del Petróleo, así como de la Asociación de Alcaldes, los gobernadores Henrique Capriles y Henri Falcón, Fedecámaras, Conindustria, Conseturismo y defensores de derechos humanos, tales como Provea y el Foro Penal Venezolano. Igualmente participaron las directivas de los colegios de abogados, de periodistas y de médicos, el SNTP y sindicatos de la CVG y UNT.
Ante la ausencia de personalidades del chavismo disidente, por decirlo de alguna manera, la coordinadora nacional de Vente Venezuela, María Corina Machado, aseguró: “El chavismo de base, hoy se desmorona y se une a la defensa de la Constitución. Todos conocen el acuerdo y se han incorporado al llamado nacional a la rebelión”.
Lo más trascendental del acuerdo es que le corresponderá al pueblo y no a los dirigentes políticos opositores tomar las decisiones pertinentes en ese sentido, mediante la realización de un plebiscito que se llevara a cabo el domingo 16 de julio en todo el territorio nacional.
Freddy Guevara, primer vicepresidente de la Asamblea Nacional (AN), tomó la palabra y explicó lo que decidirá el soberano. En primer término, si rechaza o desconoce la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) convocada por el presidente Nicolás Maduro. También el rol que demanda a los funcionarios públicos y a la Fuerza Armada Nacional (FAN) para lograr la restitución del orden constitucional. Y si convoca y respalda la renovación de los Poderes Públicos “que se encuentran al margen de la Constitución”, además de la conformación de un Gobierno de Unión Nacional y la realización de elecciones libres para restituir el orden constitucional.
“Hoy estamos decididos a defender nuestra Constitución, nuestra República y nuestra posibilidad de vivir en democracia, dijo Guevara. “El 16 de julio marcará el destino de Venezuela. El pueblo decidirá el futuro del país y a partir de ese resultado se inicia la Hora Cero Nacional”.
Agregó el legislador que en los días previos al 16 de julio el pueblo seguirá movilizado y servirán para organizar la “Hora Cero” y la consulta popular. “A partir del resultado del plebiscito, lo siguiente será calle sin retorno”, sostuvo el también dirigente de Voluntad Popular.
Guevara destacó que el plebiscito es un acto de desobediencia civil, pues “el pueblo elegirá lo que Maduro y el Consejo Nacional Electoral (CNE) no quieren que decidas”.
El plebiscito
El objeto de la consulta al pueblo es si desconoce o no a Maduro, a la Asamblea Nacional Constituyente y si considerará como legítimo el gobierno de Unidad que le siga. Valga recordar que los opositores venezolanos desde el 20 de junio se amparan en los artículos 333 y 350 constitucionales.
El 333 señala textualmente: “Esta Constitución no perderá su vigencia si dejare de observarse por acto de fuerza o porque fuere derogada por cualquier otro medio distinto al previsto en ella. En tal eventualidad, todo ciudadano investido o ciudadana investida o no de autoridad, tendrá el deber de colaborar en el restablecimiento de su efectiva vigencia”.
Mientras el 350 sentencia lo siguiente: “El pueblo de Venezuela, fiel a su tradición republicana, a su lucha por la independencia, la paz y la libertad, desconocerá cualquier régimen, legislación o autoridad que contraríe los valores, principios y garantías democráticos o menoscabe los derechos humanos”.
En este punto hay que decir que “en desobediencia no es necesario el CNE”, para la realización del plebiscito, como afirmó el martes, José Ignacio Guédez, secretario de la Asamblea Nacional.
Por lo tanto, la Sociedad para Avanzar en el Rescate de la Democracia y la Constitución solicitó al Parlamento que convoque la consulta (Proceso Nacional de Decisión Soberana), amparado en el artículo 71 de la Constitución para que el pueblo se adhiera masivamente a la desobediencia (artículos 333 y 350 de la Constitución): “Que el pueblo decida cuál es la vía que seguirá la nación en esta encrucijada histórica. Invocamos los artículos 5, 333 y 350 para elegir el futuro y defender el mandato que surja de este proceso como una fase superior de la lucha. Es decir: el levantamiento democrático en la totalidad del territorio y el inicio de la Hora Cero nacional”, explicó una información de El Nacional de Hernán Lugo-Galicia.
“El 16 de julio se instalarán 1.600 centros de votación en el país y 108 en el mundo. Estarán en plazas, universidades, iglesias y templos evangélicos, que asignará la CEV y el Consejo Nacional Evangélico. Votarán los mayores de 18 años de edad, inscritos en el registro electoral”. Julio Borges, presidente de la AN, destacó que “La organización está lista”.
Posteriormente, el 17 de julio, el Parlamento avalará la decisión del pueblo y declarará fuera del cargo a Nicolás Maduro. “El país y el mundo deben entender que esto es un proceso democrático de rebeldía popular en ascenso. Una vez que el pueblo haya decidido, haremos respetar su soberana sentencia”, como destaca el acuerdo.
La Hora Cero
El gobernador del estado Miranda y excandidato presidencial, Henrique Capriles recordó que el régimen “pretende formalizar la dictadura” el 30 de julio a través de la Asamblea Nacional Constituyente y con “organización propia y soberana” se logrará que millones de venezolanos se expresen y la rechacen”.
En otras palabras, la llamada Hora Cero llegará después del 16 de julio y se traduce en lo que se hará antes del 30 de julio, fecha en que el régimen de Maduro tiene previsto realizar la ilegal Asamblea Nacional Constituyente, como han señalado abogados constitucionalistas y hasta conocidos rostros del chavismo.
Freddy Guevara explicó que después de que los ciudadanos participen en el plebiscito, y se obtengan voluntades que respalden las propuestas, se procederá con la “Hora Cero”.
“Esta consiste en lograr que en todo el país, en todos lados, se tomen todas las calles. Para conseguirlo, se harán uso de todos los mecanismos de protesta en simultáneo hasta lograr el cambio”, mientras que María Corina Machado sentenció: “Haremos cumplir la decisión que ese día (16 de julio) millones de venezolanos manifestaremos”.