La escasez de dinero en efectivo. Los puntos de venta: nuevo culpable del gobierno. El régimen de Nicolás Maduro frente a la distorsión económica que asfixia al país, necesita encontrar un culpable por la falta de dinero en efectivo. Lo encontró en los puntos de venta con tarjeta de débito.
Nadie olvida aquella cadena de radio y TV en la que Nicolás Maduro anunció que después de 72 horas, es decir el 16 de diciembre, quedaría sin efecto el billete de 100 bolívares, el de mayor denominación para ese momento. Y señaló que desde “la semana próxima entran progresivamente en vigor nuevos billetes de 500, 1.000, 2.000, 5.000, 10.000 y 20.000”.
La causa de esta medida: unas presuntas investigaciones durante dos años debido a la extracción del papel moneda y del billete de 100 bolívares que desde Colombia se ha llevado a cabo.
“Es de Cúcuta y Maicao donde hay un centro permanente de ataque a la moneda venezolana, al sistema bancario y de extracción de billete”, acusó Maduro. Y precisó que son más de trescientos mil millones de bolívares que están en “las manos de las mafias”, dirigidas desde Colombia y Brasil también. “Almacenes enteros de billetes de 100 (bolívares) en Cúcuta, Cartagena, Maicao, Bucaramanga”, nombró en esa ocasión.
A la postre la realidad lo golpeó, pero más a los venezolanos. Fue enorme el caos que se generó en el país frente a ese anuncio, especialmente en el estado Bolívar, donde se registraron cinco muertos durante los saqueos y protestas reportados desde ese viernes 16 de diciembre hasta el domingo 18 por la falta de dinero en efectivo después de la anulación del billete de 100 bolívares.
El resto de la historia es conocida por todos. El billete de 100 bolívares sigue circulando y el nuevo cono monetario, sobre todo en los billetes de 10.000 y 20.000 bolívares, es prácticamente inexistente.
¿Quién paga los platos rotos?
En la página 9 de esta edición de Zeta, el analista económico Álex Vallenilla explica al detalle la causa por la escasez de dinero en efectivo en Venezuela, por lo que no profundizaremos en el tema. Sin embargo, hay que decir que el problema no es la imaginaria guerra económica inventada por Maduro, con el objeto de confundir a la gente y endosar la culpa a una confabulación de la derecha venezolana e internacional de la distorsión económica, generadora de una brutal inflación, creada por sus fracasadas políticas en esta materia.
El problema, como es lógico, se ha agudizado y hay que buscar nuevos culpables. Uno de ellos son los puntos de venta con tarjetas de débito en los comercios –las de créditos las aceptan muy pocos. En este sentido el régimen anunció esta semana la suspensión de 150 puntos de pago con tarjeta en el marco de su plan contra la escasez de efectivo, “un problema que achacan, entre otros factores, a la entrega por parte de comerciantes de avances en metálico que cobran con comisiones de manera electrónica”, como destacó Efe.
“Además que 65 cuentas fueron bloqueadas por avances de efectivo ilegal, y se investigan los casos de 400 puntos de pago con tarjeta de crédito o débito que se habrían utilizado para cobrar cantidades con comisión a cambio de la entrega de dinero en metálico”, cifras que fueron reveladas por el ministro del Interior, Néstor Reverol, después de que anunciara, junto al ministro de Finanzas, Ramón Lobo, “un plan de defensa de circulación del cono monetario que implica a nueve instituciones del Estado y prevé controles sorpresa en puntos de pago electrónico”.
Otras medidas de este plan estratégico propuesto por Maduro, son la supervisión de los bancos para evitar que se entreguen de forma irregular grandes cantidades de dinero en metálico a clientes y el despliegue de la Fuerza Armada en las zonas de frontera para combatir el contrabando de billetes al extranjero.
Detenciones
Por otro lado, el diario El Carabobeño informó que al menos cuatro personas fueron detenidas el martes en esa entidad por incurrir en la práctica ilegal de entregar avances de efectivo, informó la Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos (Sundde).
En otros procedimientos de la Sundde fueron detenidas seis personas por entregar avances de efectivo: tres en Ciudad Bolívar (dos asiáticos y un venezolano), dos en Zulia, y uno en Miranda (un asiático).
Lo cierto del caso es que los venezolanos se han visto en la necesidad de recurrir a la práctica de solicitar avances en efectivo en algunos comercios, porque no los consiguen en los bancos: cajeros que no funcionan, otros que se vacían rápido y no hay reposición de dinero en ellos y porque en las taquillas existen límites de apenas entre 10 y 30 mil bolívares, como máximo, por una transacción, dinero que no alcanza ni para comprar un kilo de carne molida. Así son las cosas, como decía Oscar Yanes.