Los precios ya suben cada semana. En pocas, se verá como comienzan a subir todos los días debido a una crisis de recursos y una crisis política, causada por Nicolás Maduro y el PSUV, que metieron a Venezuela en hiperinflación.
En el último año, el dólar se ha disparado 1240,70% con una subida súbita, según la cotización en casas de cambio de Cúcuta, que va desde 1.219,73 bolívares en septiembre de 2016 hasta 16.352,94 en septiembre de este año. En el sitio web que algunos usan como referencia, Dólar Today, la cotización es más alta.
La subida responde a factores como el de la suspensión del referendo revocatorio, previsto para octubre del año pasado, que hizo saltar la cotización hasta 2.819,05 bolívares con más de 100% de alza. Llegados los meses de marzo, abril, mayo y junio, en que se produjeron olas de protestas, saqueos, enfrentamientos en las calles, producto del malestar social en contra de la decisión del oficialismo de eliminar poderes de la legítima Asamblea Nacional (AN), el precio avanzaba sin clemencia hasta 5.729,17 bolívares.
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El PSUV, en vista de que su poder comenzaba a ser cercado por la comunidad internacional, luego de producir más de 130 muertes violentas, miles de heridos, decenas de miles de detenidos y más de 300 nuevos presos políticos, decidió convocar a una Asamblea Nacional Constituyente (ANC), saltándose la legalidad establecida en la Constitución al no realizar un referendo consultivo previo que permitiera saber si el pueblo estaba de acuerdo o no. Además realizó una elección, de la que dio cuenta de unos 8 millones de votos, mientras la empresa Smartmatic, propietaria del contrato para hacer elecciones, anunció en el extranjero que hubo fraude y a través de Reuters dejó saber que sólo habían sido unos 3 millones de votos movilizados.
Establecida la ANC, de tal manera, la desconfianza se profundizó y el dólar saltó a 7.153,85 al cierre de junio. Para Dólar Today el precio está sobre los 30 mil bolívares actualmente.
La incertidumbre, la nula confianza en el actual régimen, la crisis política, la escasez de divisas y las acusaciones extranjeras por corrupción -que han permitido congelar bienes mil millonarios en divisas en Estados Unidos, Canadá y próximamente en países de Europa-, así como la emisión de sanciones contra los funcionarios corruptos del oficialismo, quienes mantienen cargos de poder en áreas claves de las finanzas del país y Pdvsa, entorpecen cualquier posibilidad de que la República pueda tramitar nuevos créditos internacionales, renegociar la deuda que se vence y así dar un respiro a la economía. Estos factores son los que inciden en que el precio del dólar siga avanzando sin detenerse.
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El marcador actual, que permite a algunos economistas determinar el precio de la paridad del bolívar, supera en promedio mensual una subida de 103,39%. Si esto se tomara como base para determinar la subida de precios de muchos rubros que se venden a través de las fronteras venezolanas, al ingresar alimentos y otros bienes a precios dolarizados, se puede señalar que ya en ese caso se está en hiperinflación, tomando en cuenta el planteamiento de algunos académicos, que fijan una hiperinflación cuando se tienen 12 meses con una inflación intermensual en 50%.
Lo que se percibe en el mercado venezolano, es una abrupta subida de precios de todos los bienes cada semana y se prevé que comience a ocurrir todos los días. Pdvsa ha estado pagando a proveedores en bolívares, los cuales de inmediato se vuelcan a demandar divisas, que junto a la profunda crisis y desconfianza del venezolano, hacen disparar el precio del dólar y este de todos los bienes, luego que Venezuela apenas produce 10% de lo que consume.