La caminata tempranera por las calles de la hermosa ciudad de Coral Gables, Florida, USA, me proporcionó la grata sorpresa de encontrarme cara a cara con el arte del célebre artista venezolano Carlos Cruz-Diez (Caracas, 1923) uno de los grandes del Movimiento Cinético creado en los 50, cuya obra multicolor sigue siendo tendencia en las principales ciudades de los Estados Unidos.
No obstante estar considerada Op Art, el artista y profesor de artes plásticas, considera un error catalogar su obra como tal.
-El término Op Art -dice- fue creado por un crítico que no entendió lo que hacíamos. Lo mismo sucedió con el término impresionismo en su momento, no fue entendido y lo llamaron así.
Este nuevo proyecto al cual nos referimos hoy, que ha sido realizado en su totalidad con diseños creados por el propio artista, estuvo a cargo de la curadora Ninosca Huerta. Las calles de Cruz-Diez trazan la ruta peatonal del downtown para conducir a los transeúntes hasta el Museo de Coral Gables.
También los paseos peatonales del estadio de beisbol de los Marlín fueron diseñados por el venezolano -vive en Paris desde 1960-, máximo representante del cinetismo actual.
-Una obra de arte en el espacio público es mágica en tanto la gente toma posesión y se encariña con ella-, dice Cruz-Diez, quien considera que “el arte debe ser experimentado, vivido, y compartido.” De allí que el artista centre su creación en el entorno propicio para que las personas vivan dentro del arte, que interactúen en la obra y su observador.
Ya en septiembre de este año, el Museo The Broad, en Los Ángeles, inauguró la obra a gran escala Coloeur Additive como parte de Pacific Estándar Time, una ambiciosa iniciativa de la Fundación Getty que explotará el arte latinoamericano. Esta obra, como también la de Coral Gables, activa el espacio público de los alrededores de The Broad para llevar el museo a la vida cotidiana de los transeúntes. El arte en la calle, para ser vivido y experimentado. Hermoso.
La sorprendente explosión cromática en el asfalto sorprende al transeúnte con este nuevo entorno cromático en la ciudad de Coral Gables. Y te hace sentir parte de ella.
Para terminar, no puedo dejar de mencionar lo que a mi juicio es un espectáculo único, que me lleva a coger puesto en mi mini balcón para observar la maravillosa y única luz de los atardeceres de Miami, y que tantas veces he posteado en mi página de Instagram (gracielarequenav). Sobre el particular, el artista dice:
-Aquí, en Miami, sucede un fenómeno maravilloso en la tarde, cuando el sol comienza a descender. La ciudad adquiere otro color y eso no es una forma, es el espacio que está coloreando con otros tonos. Eso es precisamente lo que trato de hacer con mi obra.
Lo certifico.
A sus noventa y cuatro años, el maestro del arte cinético, orgullo y gloria de Venezuela, afirma, ufano: -A esta edad, tengo tanto o más trabajo que antes.
¡Gloria a Dios!