Segundo encuentro entre la posición venezolana y el gobierno de Nicolás Maduro.
Tras casi 20 horas de reuniones en dos días a 1422 kilómetros de Venezuela, no hubo acuerdos.
Tanto el Presidente de República Dominicana, país anfitrión, Danilo Medina, como el canciller chileno, Heraldo Muñoz, quien funge como país garante de la oposición así como el ministro de Comunicación e Información y jefe de la delegación, Jorge Rodríguez y su par y presidente de la Asamblea Nacional, Julio Borges, coincidieron en señalar que existieron «avances» en los seis puntos que integraban la agenda oficial.
A las 4:00 p.m. ya se sabía que no habría acuerdos.
Sin embargo, Medina indicó que las partes debían hacer sus consultas para que el 15 de diciembre se vuelvan a sentar en Santo Domingo y «concretar».
Algo que parece lejano luego de las declaraciones de ambas delegaciones.
Borges y Rodríguez destacaron que unos y otros se hayan sentado y agradecieron a los representantes de Chile, México, Nicaragua, Bolivia, San Vicente y Las Granadinas sus «buenos oficios».
Pero no hay acuerdos. Tal parece que hay puntos irreconciliables como la crisis humanitaria. Crisis que el gobierno niega aunque en la declaración final, Rodríguez reconociera que existen «problemas» con los medicamentos.
Esto luego de la irrupción De Francisco Valencia, representante de CODEVIDA, quien interrumpió al ministro para relatar cómo siendo transplantado, no consigue sus medicinas y así, 300 mil personas.
Rodríguez no sólo lo ignoró sino que insiste en que el supuesto «bloqueo económico» que ejerce Estados Unidos es el responsable de las «dificultades».
Valencia fue «invitado» a salir de la sede de la Cancillería por parte de la seguridad del sitio.
Rodríguez continuaba y al igual que Nicolás Maduro, repitió el termino de «colaboracionista» para referirse a la oposición.
Rodríguez no perdió la oportunidad para señalar que le habían ofrecido pagar un monto de dinero a Caritas por medicamentos y que estos pudieron cien mil dólares por un lote de medicamentos que según Rodríguez, «nunca entregaron».
Por su parte, Borges recalcó que la oposición busca «que los venezolanos puedan construir el país que quieren», haciendo énfasis en las garantías electorales.
Además, dijo que el Presidente Medina será el encargado de recopilar todas las propuestas que surgieron para presentarlas el próximo día 15.
La reunión duró aproximadamente seis horas. Al terminar de discutir los puntos de la agenda pendientes: propuesta sobre cooperación internacional, presos políticos y Comisión de la Verdad, ambas delegaciones abandonaron el salón para que los Cancilleres produjeran propuestas, una vez escuchadas las posiciones.
Esto fue aprovechado por las partes para almorzar pero además, la delegación gubernamental decidió trasladarse a la Embajada de Venezuela en Santo Domingo.
Esa «escapada» duró dos horas. Hecho que generó molestia en la oposición y en los Cancilleres.
Rodríguez Zapatero habría presentado una propuesta que fue rechazada. Los Cancilleres otra. El gobierno llegó de la Embajada reacio a lo relacionado con el canal humanitario y a lo que se le cambió incluso el nombre a «cooperación internacional».
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Otra situación se generó con el Canciller de Chile, tras sus declaraciones a medios chilenos en las que adelantaba que no había acuerdos. Esto causó malestar en el gobierno dominicano pues se había acordado que sería Medina el vocero.
Regresando a la reunión, el gobierno nunca colocó sobre la mesa el tema de la deuda y el refinanciamiento.
Fuentes nos señalan que sí habrían manifestado la posibilidad de presentar una propuesta para dejar sin efecto el desacato que pesa sobre la Asamblea.
Las misma fuentes indicaron que posiblemente la oposición deba buscarle un «sustituto» a Paraguay.
Aunque se volverán a ver las caras, las expectativas de cara al 15 son bastante «bajas».
No se descarta que antes del 15 continúen los equipos técnicos que han trabajado en la metodología de estos días.
Más temprano, la jornada iniciaba con un José Luis Rodríguez Zapatero, quien coordina el proceso y el Canciller dominicano, Miguel Vargas, llegando nuevamente, de primeros al lugar. Les siguió el Canciller de Nicaragua, Bolivia, Chile, San Vicente y Las Granadinas. El último fue el de México.
A las 9:30am llegó la delegación de la oposición. Veinte minutos después, la del gobierno.
Tal como ocurrió el día viernes, cada delegación aguardaba en un cuarto destinado para eso de modo tal que no se encontraran antes de las reuniones. La diferencia es que en esta oportunidad el gobierno decidió declarar no así la oposición.
Una vez que todos estaban en la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores pasaron al Salón de Los Espejos. El último en llegar fue Vicente Díaz.
Mientras, los asesores de la oposición seguían las incidencias desde un reconocido hotel de la capital dominicana.