Pleito con Ramírez es por botín escondido

No es secreto para nadie que la corrupción ha formado parte del día a día venezolano desde incluso antes de aquellas recordadas elecciones presidenciales del año 1998, donde el fallecido Hugo Chávez llegó al poder.

Sin embargo, lo que alguna vez fue una corrupción leve, o al menos disfrazada, se ha convertido en un hecho abierto y constante – incluso en instituciones del calibre de lo que es (o era) Petróleos de Venezuela.

Esta semana, tomó como sorpresa que la propia Fiscalía de Venezuela anunciara una investigación contra Rafael Ramírez. ¿Los motivos? Hechos de corrupción en “operaciones de intermediación de compraventa de petróleo” durante su gerencia en PDVSA.

¿Pero, por qué razón el actual régimen venezolano, reconocido internacionalmente como un presunto régimen corrupto (e incluso narcotraficante), se ensañaría con quien fuera predilecto del gobierno de Chávez?

Zeta conversó en exclusiva con Horacio Medina, exgerente de PDVSA, quien proporcionó un análisis detallado de cómo ha funcionado la corrupción dentro del antiguo gigante del petróleo, así como el rol de Ramírez en la corrupción del mismo.

De acuerdo a Medina, todo cambió para la industria petrolera nacional en el momento que Chávez falleció y Maduro tomó poder sobre la nación petrolera.

“Es obvio que Rafael Ramírez fue uno de los hombres más poderosos al lado de Hugo Chávez. Manejó por muchos años ingentes cantidades de dinero como mucha gente no puede imaginárselo”, explicó Medina. “A partir del momento que Nicolás Maduro ganó, el quería sacar a Rafael Ramírez del cargo y, de hecho, lo nombró canciller y después lo sacó del país, llevándoselo a la ONU.”

Sin embargo, el verdadero motivo de la investigación contra Ramírez puede ir mucho más allá de un simple desacuerdo entre él y el actual Presidente de la República. De acuerdo a Medina, existen unos fondos “cuantiosísimos”, de los cuales Ramírez nunca ha querido revelar su ubicación.

Pero no es secreto la terrible corrupción que ha existido en PDVSA desde hace al menos una década. De acuerdo a Medina, de hecho, “todo perdió control” en PDVSA cuando Ramírez fue nombrado su dirigente.

“La corrupción empezó a generalizarse de una manera importante, a romperse la institucionalidad interna, a comenzar a funcionar bajo la negligencia, bajo ningún tipo de control, bajo la posibilidad de avanzar sólo por tu forma de apoyar políticamente al proyecto de Hugo Chávez”, explicó Medina sobre el funcionamiento de PDVSA bajo el mando de Ramírez.

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Y han existido muestras claras (y públicas) de corrupción en la petrolera, según Medina. Por ejemplo, el caso de lavado de dinero de Andorra, o la tragedia de Amuay, donde perdieron la vida 55 personas y al menos 150 resultaron heridos. De este último caso, siempre quedó la duda sobre la razón por la que el complejo no estaba asegurado, cuando debía estarlo.

¿Pero es verdadera la reciente lucha del régimen contra la corrupción en PDVSA? Medina lo pone en duda.

“En este momento hay una aparente lucha contra la corrupción, pero lo cual no es cierto. Los que están siendo señalados, yo creo que en el 99% de los casos son culpables, han tenido hechos de corrupción. Pero, ahí no están todos los que son, ni son todos los que están”, explica Medina. “Hay otros con evidentes casos de corrupción que no han sido señalados, ni están siendo acusados o imputados, sencillamente porque es una lucha de mafias. Lo que existe es una lucha por el control de lo que queda de PDVSA”.

A continuación un extracto de la entrevista en exclusiva con Horacio Medina: