El Niño Jesús tiene una tarea difícil

Por.- Karina Peraza Rodríguez

Los estantes de las jugueterías llenos, la gran variedad para escoger entre tiendas y algunos comercios de chinos, se acabaron. Son pocas las opciones que tiene el Niño Jesús para buscar los juguetes que piden los pequeños para estas navidades del 2017. Esta situación se repite en cada uno de los Estados del país.

En Lara, por ejemplo, la avenida 20 del centro de Barquisimeto se encuentra repleta de gente caminando de un lado a otro, buscan precios, comparan, aún no compran, porque son muchos los padres a los que el Niño Jesús les encargó que averiguara los precios de los juguetes que quieren sus pequeños, es mucho trabajo que tiene y son demasiado los regalos a repartir.

El panorama no es bueno para los obsequios parece que muchos quedaran reducidos a recibir cosas pequeñas o resolver con lo que puedan. Y es que los precios de los bebes queridos oscilan entre 650.000 a 1.500.000 bolívares, los carros para los niños van desde 350.000 a 600.000, si son eléctricos ya pasan el millón de bolívares, las muñecas imitaciones de Barbie cuestan desde 250.000 a 600.000 depende de los accesorios que trae la muñeca, sus rostros no son atractivos para las pequeñas, pues son imitaciones y las originales son poco las que consiguen y donde las tienen sobre pasan el millón y medio. Lo más económicos son pequeñas muñecas de 10 centímetros de los personajes de princesas o de algunas series o películas de Disney que tienen un costo de 70.000 bolívares.

Patines, monopatines se consiguen entre un millón y medio hasta cinco millones, las bicicletas pueden costar hasta 10 millones de bolívares.

Aquellos juegos de herramientas, cocinas, de doctores que son de plásticos, set de maquillajes pequeños que usualmente se usaban para rifas en cumpleaños, ahora se consiguen entre 150.000 hasta 250.000 mil bolívares, los juegos de mesas como ludos, bingos, memorias, rompecabezas, entre otros van de 125.000 hasta 245.000 bolívares.

Son muy altos los precios y sin variedad, además de juguetes que no son de calidad, eso es lo que existe en los anaqueles de los negocios del estado Lara.

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Buhoneros tienen más variedad

Los comerciantes informales se han dado a la tarea todo los diciembre de montar sus puestos en las afueras de los locales comerciales convirtiéndose en competencia, con el tema de que no se encuentra el efectivo, tienen como opción de pago las transferencias, algunos hasta punto ofrecen. Lo cierto es que en los buhoneros se consigue mayor variedad de juguetes, aunque los altos costos también invaden estos puestos, pero las diferencias con los que se consiguen dentro de las tiendas pueden llegar a ser de 300.000 bolívares.

Algunos hasta ofrecen muñecas que no sirven en 250.000 bolívares y el mismo modelo, pero funcionando en 600.000, juguetes usados y con muchos defectos son las opciones que dan los comerciantes informales a los larenses.

Padres atados de mano

También están aquellos casos en los que los padres suelen hacer sus regalos a sus hijos.

La mayoría de los consultados se sienten atados de manos, expresan que los pequeños deben recibir sus regalos, pero casi ninguno tendrá lo que quiere, ni tampoco lo que quisieran comprarle, porque el dinero no alcanza.

La prioridad en el hogar de los larenses a la hora de cobrar o percibir algún dinero es la comida, son varios los casos que se consiguen entre las personas que acuden por un juguete.

Naikar Camacaro, cuenta con un presupuesto de un millón para el regalo de su hija, tiene ese dinero gracias a que su esposo trabaja en una academia de Beisbol y les ha ido bastante bien, asegura que ha caminado y no ha conseguido nada, su bebé tiene año y medio, quería regalarle algo musical pero están cerca de los 900 mil y son cosas pequeñas que para ella no vale la pena gastar tanto dinero, relata que hace una semana observó una muñeca en 780 mil y al regresar está semana en 1.600.000 más del doble, no la pudo comprar, sigue caminando, pero sabe que al ver algo debe adquirirlo de una vez porque los precios cambian todos los días.

La realidad para Maritza Aristigueta, es otra porque su esposo se encuentra fuera del país y le ha ido bastante bien, el dinero para ello no es impedimento, pero ha sufrido porque no encuentra lo que quiere, ni existe variedad, un testimonio similar fue el del señor Carlos Moreno, quien tiene a su hermana fuera del país, específicamente en Perú y ella se encargó de los gastos de su sobrina, confesó que para ellos no había dinero, pero mientras su hija estuviera bien, no le importaba.

Así mismo algunas madres expresaron que corrieron a la jornada del Carnet de la Patria con la esperanza de registrarse y que les dieran el bono de 500.000 bolívares para completar, asegurando que solo por eso lo sacaban.

Nelsi Castillo, no la tiene fácil con los regalos su hija tiene 7 años y está pidiendo unos patines, ella no cuenta con el dinero y va a ver que muñeca le consigue, mientras su hijo de 3 años de edad le compró un balón, pero quiere completar con algo, pero los precios no la ayuda, observa los juguetes y guarda silencio, en su cara se ve la preocupación, pero dice que tiene que ver cómo consigue el dinero, pues son sus hijos y no los puede dejar sin nada.

Pero la realidad de la mayoría de los entrevistados era la misma, las utilidades no le alcanzaron para comprar todo, una persona que devenga sueldo mínimo, recibió un estimado de utilidades entre 260.000 y 280.000 dinero que solo alcanza para un juguete pequeño de plástico, o muñequitas de 10 centímetros, ni siquiera para un carrito. Son al menos tres meses de trabajo que tienen que reunir un padre para comprar algo decente.