Por instrucciones del nefasto gobierno de Cuba, no se permitirá la restauración del sistema democrático en Venezuela.
¡Asombroso! El régimen confiesa que administra un Estado convertido por ellos en forajido. Todo el mundo democrático condena la conducta de la cúpula mafiosa que detenta el poder, y ellos solo dicen: ¿Por qué solo a nosotros y no a países como Irak, Siria, o Libia? ¿Qué quieren decir con eso?
El subjetivismo del régimen es solo superado por los secesionistas catalanes. Quieren mantenerse a trocha y mocha, inconstitucional e ilegalmente en el poder e imponer caprichos.
Desde 1989 vienen minando el sistema democrático, aprovechando las instituciones democráticas. Se les olvida la conducta injerencista de los criminales de Cuba desde 1962, que luego acentuaron por debilidad del sistema. Cosa que también asumieron ellos desde el 2000.
Hoy, por los convenios militares y económicos con Cuba, el régimen del malandraje de corruptos se empeña en impedir la oxigenación de la democracia para restablecer la independencia de los poderes de la República.
Asaltantes de bancos, desvalijadores de vehículos, terroristas urbanos, ladrones de cantinas, extorsionadores y toda clase de conducta reñida con la ley es lo que prevalece en esta nación de conductas impunes.
Hoy se rasgan las vestiduras y por la hegemonía comunicacional pretenden hacerle ver al pueblo que todo lo hacen para mejorar la vida de los venezolanos. Llevamos 20 años con el mismo discurso.
Publicidad falsa, campañas de adoctrinamiento violadoras de derechos humanos, arengas criminales contra la disidencia, despilfarro del erario público, dilación de las obligaciones constitucionales para el pueblo, ah… y todo con la complacencia de los garantes de la constitucionalidad, la cúpula de las FAN.
Por instrucciones de Fidel y de Raúl Castro, fomentaron la realización del diálogo. A los dictadores de Cuba les ha ido muy bien, desde el bloqueo contra la cúpula de comunistas cubanos han sobrevivido más de cinco décadas chuleando al mundo. Hoy este régimen va por el mismo camino.
Desde 1999, venimos oyendo de boca de simpatizantes del régimen su reproche por la impunidad con que actúan algunos funcionarios, quienes por detentar el poder se creen los nuevos amos de la República. En privado reconocemos pero en público negamos.
Cuando los políticos se convenzan de que la función pública no es para el enriquecimiento personal, ni beneficios ni privilegios, tendremos la posibilidad de una función en beneficio del pueblo y no de quienes detentan el poder.
Este régimen está compuesto por amañadores de oficio, falsificadores, estafadores, timadores, gorreros, criminales, bueno hasta asaltantes de caminos, ¿qué podemos esperar del resultado?
La dirigencia de la oposición política venezolana, no muy ducha en dialogo entre demócratas y comunistas, se ha venido manejando muy precariamente, primero, se dejaron imponer unos agentes del castrocomunismo, y luego los acorralaron en un callejón sin contar ellos, los dirigentes de la oposición, con la mismas oportunidades comunicacionales que el régimen, para que el pueblo no siga engañado por las mentiras y falsedades del régimen.