Candidatos chavistas quitarán votos a Maduro

El Consejo Nacional Electoral (CNE) decidió el martes extender por 48 horas el lapso de postulación de candidatas y candidatos, por solicitud de diversas organizaciones con fines políticos.

De tal manera que ayer jueves fue cuando se cerró el período de postulaciones, pero entre lunes y martes oficializaron sus candidaturas, luego de ser presentadas a través del sistema automatizado, Reinaldo Quijada, Francisco Visconti Osorio, Luis Alejandro Ratti, Henri Falcón y Javier Bertucci, además del presidente Nicolás Maduro, como aspirantes a ejercer la primera magistratura del país en el período 2019-2025.

Nicolás Maduro fue postulado por el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Movimiento Somos Venezuela (MSV), Tendencias Unificadas para Alcanzar el Movimiento de Acción Revolucionaria Organizada (Tupamaro), Unión Popular Venezolana (UPV), Por la Democracia Social (Podemos), Patria Para Todos (PPT), Organización Renovadora Auténtica (ORA), Movimiento Político Alianza Para El Cambio, (MPAC), Movimiento Electoral del Pueblo (MEP) y Partido Comunista de Venezuela (PCV).

Francisco Visconti y Luis Alejandro Ratti son candidatos por iniciativa propia. Visconti formó parte de los militares que acompañaron a Hugo Chávez en la intentona golpista contra el presidente Carlos Andrés Pérez en 1992 y ahora es dirigente del Frente Amplio Nacional Bolivariano (FANB).

Reinaldo Quijada fue postulado el lunes por el movimiento Unidad Política Popular 89 (UPP89). Fue militante del PSUV y UPP89 formó parte del Gran Polo Patriótico hasta 2016.

A Henri Falcón lo respaldan Avanzada Progresista (AP), Movimiento Al Socialismo (MAS) y Comité de Organización Político-Electoral Independiente (Copei). Falcón también estuvo ligado a Hugo Chávez.

Javier Bertucci cuenta con el grupo de electoras y electores Esperanza por el Cambio.

Henri Falcón dijo a los medios que pidió a los rectores del CNE «Observación internacional completa, amplia, eficaz y especializada a través de las Naciones Unidas» y «no veedores». No es un favor lo que estamos pidiendo. Lo estamos «exigiendo», recalcó.

También pidió la revisión del cronograma electoral para ubicar una fecha «más cónsona».

El cronograma para las elecciones presidenciales del 22 de abril establece que hasta el martes pasado se podían presentar impugnaciones al Registro Electoral Preliminar, cuya versión definitiva debe estar publicada el domingo 04 de marzo.

La sustitución de postulaciones vence este viernes 02 de marzo, mientras que la impugnación está prevista para el día siguiente.

La Organización de Naciones Unidas (ONU) confirmó el pasado martes haber recibido la petición de Venezuela para observar las elecciones presidenciales y la está examinando ya que tal decisión debe ser aprobada por el Consejo de Seguridad o por la Asamblea General.

Reacciones

Así las cosas, surgen comentarios de que los chavistas tienen varios candidatos si quieren salir de un gobierno que ha destruido más de medio país.

En el caso de Henri Falcón, la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) reaccionó el miércoles repudiando su postulación y dijo en las redes sociales que con ese paso, Falcón se aparta de la Unidad y del sentimiento democrático del pueblo Venezolano.

Al unísono comenzó a través de las redes sociales y medios tradicionales otra campaña de descrédito contra el ex gobernador del estado Lara y para enredar más las cosas, el presidente nacional de Copei impuesto por el TSJ, Pedro Urrieta, dijo el miércoles que ninguna instancia del partido aprobó apoyar a Falcón y por lo tanto impugnarán esa postulación.

Los opositores decepcionados de la MUD consideran muy oportuna la entrevista publicada el pasado domingo en El País de Madrid con Mario Vargas Llosa a propósito de su más reciente ensayo titulado «La llamada de la tribu».

El escritor peruano y ganador del premio Nobel explicó que su ensayo  es un alegato a favor del pensamiento liberal que reivindica al individuo como ser soberano y responsable, y a la libertad como valor supremo; que defiende la democracia y la separación de poderes como el sistema que mejor concilia los valores contradictorios de la sociedad. Una doctrina que reacciona frente al «espíritu tribal» que han alimentado históricamente el fascismo, el comunismo, el nacionalismo o el fanatismo religioso.

El escritor peruano que en sus comienzos creyó en la revolución cubana pero luego entendió la realidad, plantea que los ataques de esos adversarios definen muy bien la estrecha relación que existe entre el liberalismo y la democracia. La democracia ha avanzado y los derechos humanos han sido reconocidos fundamentalmente gracias a los pensadores liberales.

Más adelante precisa que el liberalismo no solo admite, sino que estimula la divergencia. Reconoce que una sociedad está compuesta por seres humanos muy distintos y que es importante preservarla así. Es la única doctrina que acepta la posibilidad de error. Por eso insiste mucho en que no es una ideología; una ideología es una religión laica. El liberalismo defiende algunas ideas básicas: la libertad, el individualismo, el rechazo del colectivismo, del nacionalismo; es decir, de todas las ideologías o doctrinas que limitan o cancelan la libertad en la vida social.

Los opositores decepcionados de la MUD entienden que eso ha jugado a favor de la nefasta polarización estimulada por el Gobierno y sus asesores extranjeros.

En vez de aprovechar las ideas y acciones de algunos políticos que inicialmente se equivocaron con Chávez, recurren a su descalificación sin reconocer su trayectoria y sus logros desde los cargos de elección popular que han ocupado.

Mario Vargas Llosa agrega que el mayor enemigo hoy es el populismo. No hay nadie medianamente cuerdo que quiera para su país un modelo como el de Corea del Norte o el de Cuba, o el de Venezuela; el marxismo es ya marginal en la vida política, pero no así el populismo, que corrompe las democracias desde dentro, es mucho más sinuoso que una ideología, es una práctica a la que por desgracia son muy propensas las democracias débiles, las democracias primerizas.

Vargas Llosa resalta que la corrección política es enemiga de la libertad porque rechaza la honestidad, es decir, la autenticidad. Hay que combatirla como una desnaturalización de la verdad.

Opciones

Ante la posibilidad de que la comunidad internacional no logre desmontar la reelección de Nicolás Maduro, grupos opositores preparan diferentes opciones.

El politólogo Nicmer Evans, vocero del Movimiento por la Democracia y la Inclusión y director de Visor 360 Consultores, dijo el miércoles a través de Unión Radio que «suponer que va a haber condiciones plenas para poder salir del gobierno de Nicolás Maduro por vía democrática es un absurdo (…) la participación electoral es uno de los mecanismos de presión necesarios para poder destrabar el juego porque el abstencionismo es cruzarse de brazos».

Insistió en la necesidad de presentar al país una fórmula que además del presidente y el vicepresidente, incluya un mini gabinete de ministros integrado por gente que provenga de la MUD y del chavismo.

Otros plantean cerrar el ciclo de la MUD y crear un Frente Amplio Nacional, pero desde el estado Trujillo asomaron esta semana la idea de convocar a un «Referendo Social Nacional» para una fecha memorable como es el 19 de abril. La idea parte de la sociedad civil tratando de corregir los errores de los partidos políticos.