La delegación de la Asamblea Nacional (AN) que asistió a la Cumbre de las Américas en Perú hizo la propuesta de elevar la corrupción a nivel de delito de Lesa Humanidad.
La Cumbre de Las Américas tuvo la virtud que de 34 Presidentes asistieron 32 y el tema central fue la Gobernanza para luchar contra la corrupción. El tema Odebrecht se hizo presente en todos los foros, especialmente en el organizado por ParlAmericas, donde se discutió el punto y se decidió que los parlamentos tenían que asumir el compromiso de desarrollar un “Proyecto de la Red de Parlamento Abierto” para que la transparencia, el control, la rendición de cuentas y la participación ciudadana garanticen la lucha contra las diversas formas de corrupción que corroen las entrañas del sistema democrático.
Allí nos hicimos presentes una densa delegación de diputados de la AN, participando en las mesas de trabajo tendientes a la modernización de la institución.
Es muy importante resaltar que pese al bloqueo económico, politico y jurídico contra la AN pudimos demostrar el esfuerzo en la modernización de esta, sobre todo en el proyecto del parlamento abierto.
Nuestra delegación habló. Hicimos propuestas como la de elevar a nivel de delito de Lesa Humanidad la corrupción. Esta propuesta es muy importante porque sacaría del ámbito político la lucha contra este flagelo para centrarlo en las consecuencias nefastas en lo social que afecta principalmente a los más débiles.
De hecho, el problema de la corrupción son las víctimas que en Venezuela es el pueblo que no puede comprar ni medicinas ni comida, simplemente porque los corruptos del Régimen se robaron o malversaron los fondos que se requieren para importarlos.
Odebrecht prácticamente se convirtió en el brazo geopolítico expansionista de Lula y el Estado Brasileño. Lula llamaba presidentes para gestionarles contratos a Odebrecht y en el caso de Venezuela la contratación del segundo puente sobre el Lago de Maracaibo fue de 3700 millones de dólares y solo está ejecutado el 17 % de la obra.
La respuesta de Maduro fue ordenar que se concluyeran las obras inconclusas. El reino de la impunidad. Tapemos el hueco. No persigamos a nadie y contratemos de nuevo (incluyendo gobernaciones). Encubrimiento, irresponsabilidad, complicidad, captura del Estado, etc., se convierte en la ley de la tiranía para esconder los hechos de corrupción.
Lo cierto es que la Cumbre trató el tema y lo mismo ParlAmericas, después siguiendo el Plan que hemos diseñado en la Comisión de Política Exterior nos reunimos con venezolanos de la diáspora en Lima. Nuestra tesis es promover los derechos humanos de los migrantes y esa lucha la estamos dando.