Catastrófico: producción de PDVSA está por caer a 1 MM de barriles diarios

 

El petróleo marcha así.

Por Juan Fernández

*Además del aislamiento económico decretado por EEUU contra Venezuela, la merma de producción de PDVSA en vez de corregirse, se acentúa, anunciando un tétrico panorama económico nacional. 

El precio del crudo se cotiza a niveles que no se observaban en el mercado y marca máximos desde noviembre del 2014. Sobre los fundamentos de mercado: hay una demanda creciendo dentro de los estimados de la OPEP y la AIE, mientras que los niveles de inventario globales se han venido reduciendo. En consecuencia, las variables exógenas a los fundamentos de mercado, tales como situaciones geopolíticas, influencian la formación del precio y en especial el mercado de futuros, el cual marca la disposición de los compradores a pagar más por el petróleo.

Hoy en día tenemos dos situaciones geopolíticas de influencia para el precio. La primera es la vuelta de las sanciones a Irán por parte de los EEUU, con un  impacto en el suministro, bien sea por el diferimiento de inversiones por las limitaciones de las empresas petroleras en primer lugar de los EEUU, y en segundo lugar las de la UE que potencialmente tendrían complicaciones para hacer negocios en Irán, al igual que los compradores de crudo iraní, porque según Commerzbank, las sanciones podrían estar activas en menos de 180 días, periodo durante el cual se reducirán de forma progresiva las compras de petróleo a Irán por parte de los países que sigan o se vean impactados por la decisión del gobierno de los EEUU. El estimado de impacto se ubica entre 500 mil y 1 millón de bpd, como efecto sobre exportaciones de Irán. La segunda razón geopolítica es Venezuela, donde la caída de su producción continuará y para varios analistas, inclusive como ya hemos señalado en estas notas, la producción venezolana podría caer por debajo de 1 millón de bpd, un escenario más que catastrófico para la economía del país. En este sentido, la agencia Europa Press estima que la OPEP podría acordar un aumento de la producción en su reunión del próximo mes de junio, por los efectos de la caída de la producción de Venezuela y ahora por las sanciones a Irán,  Las fuentes de la agencia de noticias europea, comentaron sobre relajar el acuerdo de reducción para llevar al 100% el acuerdo de reducción que hoy en día se encuentra en un grado de cumplimiento del 166%.

   En cuanto a los EEUU, el número de taladros para la semana del 18 de mayo fue de 1.046, lo que representa 145 taladros más que hace un año para el mismo período. Sin embargo, los niveles de inventario, según el Departamento de Energía, para la semana del 18 de mayo disminuyeron en 1,4 millones de barriles, para un total de 432,4 millones, un resultado ubicado en la mitad baja del rango promedio para esta época del año, en donde las refinerías se preparan para la temporada de verano, la de mayor consumo de gasolinas. Este resultado fue lo contrario del estimado por API de un aumento de 4,5 millones de barriles. Por ende, esta variación de inventario en los EEUU, influyó en el  aumento esta semana.

Irán

Irán es el tercer productor de la OPEP y como todo el mercado reconoce la vuelta a las sanciones por parte de los EEUU, se verá  afectado en sus planes para el desarrollo de inversiones en el sector petrolero y del gas, que requiere un estimado de US$200.000 millones de inversión. El ministro iraní de petróleo, Biyán Namdar Zangané, dijo a los periodistas luego de una reunión con representantes de la UE, lo siguiente: “Nosotros esperamos que Europa nos ayude a recibir el dinero por las exportaciones de petróleo que hacemos. Estamos recibiendo la mayoría de nuestros ingresos en Euros y se necesita que circulen por la banca en Europa”. Irán exporta a la UE unos 700 mil bpd, un tercio de sus exportaciones totales, pero además venia haciendo una serie de acuerdos con petroleras europeas y en este momento los mismos están siendo revisados por las empresas en vista a las sanciones de los EEUU. El comisario de la UE para el tema energético, el español Miguel Angel Cañete, declaró al respecto: ”Nosotros vamos a comprometernos a negociar la posibilidad de aceptar exenciones a las condiciones preexistentes, basados en la cláusula de los contratos denominada “Grandfather Clause” mientras los EEUU fueron parte del acuerdo nuclear con Irán, cláusula particularmente importante para las compañías europeas”. También el comisario Cañete dijo que la UE comenzará a elaborar legislación para proteger a las empresas europeas de sanciones con el denominado “Blocking Statute”, el cual consiste en bloquear la aplicación de una ley en una jurisdicción de otro país, distinta a la de la UE. Es un sistema que aplicó en 1996 la UE en respuesta a las sanciones de los EEUU sobre Cuba, y también sobre Libia, con el desacuerdo de los EEUU, aun cuando no se aplicó, pues  en 1998  la UE  logró un acuerdo político al respecto con los EEUU para evitar sanciones por la llamada ley Helms-Burton.

   El transporte de petróleo y gas por la vía del estrecho de Ormuz, es un tema clave en toda esta situación en desarrollo. En el pasado fue un punto de atención, Irán amenazando con cerrar el paso.  Pasan por allí alrededor de unos 18,5 millones bpd de petróleo para abastecer el mercado global, en especial Europa.

En conclusión, se trata de un asunto en donde el impacto de la decisión de los EEUU tiene una seria de aristas, las cuales aún están por verse y evaluarse, son de gran complejidad y en donde los intereses económicos tienen un peso importante, no tan solo desde la óptica de la UE, sino también de China y el mercado del Asia,  cliente clave de Irán en sus exportaciones y en inversiones del sector. Los rusos potencialmente tienen una oportunidad de reemplazo, de sustitución de las empresas occidentales para invertir en Irán.

Luego del evento del 20M, la reacción global no se ha dejado esperar cuando mayoritariamente no se reconoce el proceso llevado a cabo para la elección presidencial en Venezuela. Son públicas las reacciones de rechazo al supuesto evento electoral por parte de diversos países y gobiernos. Esta situación, trae como consecuencia un aislamiento del régimen, lo cual era un escenario predecible y como ejemplo, ya vino la aplicación de nuevas sanciones al régimen de Maduro en el ámbito financiero por parte de la administración del presidente Donald Trump. Su alcance abarca tanto a personas jurídicas naturales con ciudadanía estadounidense dentro o fuera del territorio de los EEUU, y las medidas son aplicables tanto al gobierno venezolano, como al BCV, PDVSA y las empresas en  donde la participación del gobierno sea mayor del 50% de su patrimonio. Las medidas aumentan las restricciones y siguen limitando la capacidad de endeudamiento, al no permitirse dar en garantía ni facturas comerciales, ni activos. Complementan las anteriores sanciones sobre emisiones de deuda y acceso a la banca de inversión de los EEUU.

La crisis de PDVSA, independientemente de esta nueva rueda de sanciones, seguirá en caída libre, con alta probabilidad de caer por debajo de 1 millón de bpd de la producción y además con las necesidades de importar crudo y componentes para el consumo del mercado interno. Son importaciones que deberán ser canceladas de contado, lo cual con la falta de caja y sin la habilidad para otorgar garantías, hará que el suministro desde los EEUU no será posible y aun cuando PDVSA importa crudo y productos con origen ruso, chino y europeo en función de pagarlo con entregas futuras de crudo, inclusive estos proveedores saben que el pago a futuro es incierto y de alto riesgo, con lo cual el Premium por Riesgo también aumentará el costo a nuestro país.

A las sanciones de Trump se le suman las acciones que Conoco-Phillips viene tomando para hacer efectiva la compensación del arbitraje, complicando el comercio, transporte y almacenamiento de crudo propiedad de PDVSA. De hecho las propias navieras no quieren verse involucrados en afectación de sus buques por medidas legales aplicables a la carga de PDVSA y los traders al tener que transferir la propiedad en la brida de carga, saben que esto implica todo un proceso de valoración, inspección y de modificaciones contractuales significativas para minimizar el efecto de los potenciales embargos. Es decir, se trata de la afectación de precio a costa de PDVSA.

   Según la agencia Reuters, con la caída de la producción de PDVSA, una de las principales afectadas es CITGO, en donde el suministro ha caído hasta un 26% en los primeros 4 meses de 2018, equivalentes a un volumen de 155 mil bpd. Luego las compras de Chevron, Phillips 66, y PBF Energy también caen, solo Valero incrementa marginalmente sus comprar equivalentes a 173 mil bpd.

El total de las importaciones venezolanas al mercado de la Costa del Golfo, (el que mejor valora y paga el crudo venezolano), es un 31% menor en abril 2018 en comparación con el mismo mes del año pasado. En nuestra opinión, la data anterior demuestra que no es necesaria la imposición de sanciones a las importaciones de los EEUU al crudo venezolano, cuando se vienen cayendo por baja constante de la producción.

En conclusión, con unos socios de la OPEP conscientes de la nula recuperación de la producción venezolana, y el aumento previsible de su caída, con cada vez más restricciones financieras internacionales, las cuales aunque no se diga públicamente también afectan a Rusia y China, dos de los grandes acreedores del país, aparece entonces un escenario político de inestabilidad, sin capital humano capacitado y conocedor del negocio petrolero. Con este régimen los venezolanos tenemos cero probabilidad de una recuperación económica.

La alternativa tiene que ser el cambio de modelo, de lo contrario el país con las reservas más grandes de petróleo será una referencia en las enciclopedias, y se buscará en Wikipedia como referencia de lo que pudo ser un país próspero económicamente, que debió haber aprovechado el cambio de modelo rentista hacia una economía diversificada generadora de valor y bienestar para los ciudadanos. ¡¡¡¡Todavía estamos a tiempo!!!!.

@JFernandeznupa