Por Alfredo Conde
*Omar Mora Tosta es uno de los abogados que ha tenido la difícil y hasta peligrosa tarea de defender a los presos políticos en Venezuela. El abogado, en entrevista para Zeta, habla de los recientes sucesos registrados en El Helicoide, que causaron gran impacto en el país y en el plano internacional, así como de la lamentable condición de reclusión y la sistemática violación a los DDHH que viven los presos de conciencia del régimen de Nicolás Maduro en Venezuela.
De ser cierto lo que Nicolás Maduro le dijo el miércoles a Javier Bertucci, excandidato de la cuestionada farsa electoral del domingo 20 de mayo -como la denomina la oposición-, quien ocupa la silla de Miraflores estaría reconociendo la existencia de presos políticos en Venezuela, es decir, de presos de conciencia, por pensar distinto. Pero también en su “reunión de trabajo” con Bertucci, reconoció lo que él y los voceros de su régimen no se han cansado de negar: la emergencia humanitaria en el país, al decir que permitiría el ingreso a territorio venezolano de alimentos y medicinas. En todo caso, ver para creer.
Lo de los presos políticos en Venezuela fue uno de los argumentos esgrimidos por la comunidad internacional para no reconocer las elecciones del 20/M, pues el gobierno de Maduro no solo ha empleado el método de la inhabilitación política de líderes opositores (ejecutada por la Contraloría General de la República y otros organismos, etc.), sino también los ha encarcelado (caso Leopoldo López, por ejemplo) para sacarlos del camino y no permitirles participar por un cargo de elección popular.
La enérgica protesta, pero pacífica, de los presos de conciencia recluidos en El Helicoide, que comenzó el pasado 16 de mayo, no solo ha sido noticia de primera plana a nivel nacional. Lo sucedido llegó a todo el mundo y dejó más al descubierto la grave violación de los derechos humanos de todos los que se encuentran allí recluidos.
El doctor Omar Mora Tosta, quien se ha encargado de la defensa de varios presos políticos, en entrevista para Zeta, no solo habla de ese suceso ocurrido en El Helicoide, sino también de la lamentable condición de reclusión y la sistemática violación a los DDHH que padecen los presos de conciencia en Venezuela.
-Desde hace varios días se viene hablando de las detenciones de varios efectivos de la FANB. ¿Qué conocimiento tiene de ello?
-Si. Se han venido practicando muchas detenciones a nivel nacional, estamos comenzando a recibir los casos. Esta semana estuvimos asistiendo a un grupo de oficiales de fuerzas especiales de la Armada y la Fuerza Aérea, que lamentablemente, fueron arbitrariamente detenidos y se les sindica de los delitos militares de traición a la patria, motín, instigación al motín y contra el decoro militar. Fueron privados de libertad en el tribunal primero de control militar a cargo de la mayor Pérez de Mogollón. Se les impidió al grupo de abogados de confianza que los pudiéramos entrevistar y asistir, y de manera irregular se les introdujo a la audiencia con “defensores públicos militares”, cercenando el derecho a la defensa, y a tener la defensa que ellos querían.
Lo sucedido en El Helicoide es una prueba palpable de que todas las denuncias que se han hecho tanto nacionales como a nivel internacional, en relación a la sistemática violación de los derechos humanos en el país, son una realidad.
UNA DURA REALIDAD
-Doctor, lo sucedido en días pasados en El Helicoide, personalmente lo considero un suceso de gran impacto, tanto dentro del país como fuera de él; un suceso que desnuda aún más la lamentable situación que viven los presos políticos en Venezuela. ¿Cómo lo califica usted?
–Definitivamente, es la prueba palpable de que todas las denuncias tanto nacionales como a nivel internacional, en relación a la sistemática violación de los derechos humanos en el país, son una realidad. Situaciones como esta, se repiten prácticamente en todas partes del territorio nacional, y especialmente en los casos de los presos políticos, cuestión que ya se percibe como una “política de Estado para perseguir a la disidencia”, porque no solo es la detención arbitraria, sino los tratos crueles e inhumanos, torturas, desapariciones forzadas, la negación absoluta de sus derechos constitucionales y procesales, lo cual ha conllevado a la sensación en la comunidad internacional de que en Venezuela se están cometiendo crímenes de lesa humanidad contra una parte de la población por razones políticas, ideológicas, etc., lo cual está siendo sustanciado.
–¿Cuál es la verdadera situación de los presos políticos en El Helicoide? ¿Qué trato reciben y en qué condiciones se encuentran?
-Nuestros presos políticos, no solo en El Helicoide, sino en el resto de los sitios de reclusión como La Tumba, y en los penales del interior del país, son maltratados y sus derechos fundamentales son conculcados. Están en condiciones de hacinamiento e insalubridad, de aislamiento de familiares, de abogados, y en algunos casos hasta del resto de la población carcelaria, sin poder ver la luz solar por meses o de manera permanente, sin energía eléctrica, sin agua, sin atención médica.
-Los presos políticos de El Helicoide –prosigue Mora Tosta-, llegaron a un estado de hartazgo y desesperación, que los llevó a alzar su voz de protesta, enérgica pero pacifica, sin armas, en virtud de la brutal golpiza que se le propinaron a uno de ellos, Gregory Sanabria, en un hecho, según lo que ellos mismos expresaron en redes sociales, fue responsabilidad de sus custodios. Gregory Sanabria, tal y como lo expreso su defensor, debería estar hospitalizado, porque tuvo fisura de cráneo y fracturas de la nariz, y diversas contusiones, sin embargo, solo lo llevaron al hospital militar y lo devolvieron. Ante ello, los presos políticos y los presos comunes que se encontraban en El Helicoide se unieron en protesta, por cuanto los tratos crueles e inhumanos les son propinados sin distingo. El derecho a un debido proceso y al derecho a la defensa, a sus garantías constitucionales, les son negados diariamente.
-Por otro lado -continúa-, las boletas de libertad de los tribunales no son tramitadas. Los traslados a tribunales tampoco. Las visitas prohibidas a capricho al igual que las visitas de abogados. Y por último, la presencia de detenidos a quienes ni siquiera han presentado en meses a los tribunales, es decir, prácticamente se encuentran secuestrados, así como algo gravísimo, la presencia de menores de edad detenidos en ese sitio, cuestión que finalmente fue reconocido por el Ministerio Público designado por la asamblea nacional constituyente. Esto en su conjunto provocó la protesta. El Helicoide es un sitio infernal. Imagínate lo infernal que debe ser que los propios presos comunes pidieron ser trasladados a otros penales donde las cosas no son nada buenas.
-Está el caso del mormón estadounidense Joshua Holt, recluido en El Helicoide, el cual también sacudió las redes sociales. ¿Qué repercusiones internacionales y acciones legales podría tomar Estados Unidos?
–Lo importante de lo ocurrido es que reveló un secreto a voces… Dentro de ese sitio, en sus mazmorras, se violan derechos humanos de nacionales y extranjeros, cuestión que hicieron publica los propios afectados o víctimas. Ello trae consecuencias negativas para el gobierno actual en el ámbito internacional, toda vez que por ello sigue en el ojo del huracán en materia de violaciones a los DDHH, y seguramente esta situación alimentará el expediente que se sustancia en instancias internacionales protectoras de los derechos humanos, y en la Corte Penal Internacional. Los Estados Unidos seguramente harán, como lo han hecho, exigencias de que se respeten los DDHH de Joshua Holt, así como que se preserve su vida, además, de otras acciones diplomáticas, toda vez que hasta la fecha a ellos tampoco se les ha permitido verlo.
BADUEL Y CAGUARIPANO
-Como abogado defensor de varios presos políticos, ¿qué nos puede decir sobre lo que sucede en otros lugares de reclusión, como Ramo Verde, por ejemplo?
-Como lo expresé anteriormente, ya esta situación, deja de ser aleatoria, para percibirse como una suerte de modus operandi, de política constante en el caso de todos los presos políticos, civiles o militares. A lo largo de estos años, han sido perseguidos miembros de todos los estratos de la sociedad venezolana, integrantes de la sociedad civil, profesionales, estudiantes, amas de casa, policías y militares institucionales, profesores universitarios, dirigentes políticos, diputados a la Asamblea Nacional con inmunidad parlamentaria que ha sido desconocida, con sanciones ejemplarizantes, para infundir temor. Pero ello al parecer no ha bastado, y por eso en algunos casos se producen estos atropellos masivos dentro de otros sitios de reclusión, como represalia a alguna circunstancia que esté ocurriendo en ese momento en el país.
Esta semana asistimos a un grupo de oficiales de fuerzas especiales de la Armada y la Fuerza Aérea, que fueron arbitrariamente detenidos. Se impidió al grupo de abogados de confianza que los pudiéramos entrevistar y asistir, y de manera irregular se les introdujo a la audiencia con “defensores públicos militares”, cercenando el derecho a la defensa, y a tener la defensa que ellos querían.
-¿Cuál es la cantidad de presos de conciencia que hay en Venezuela? ¿Esa cifra se mantiene estable o se incrementa?
–Nuestros presos políticos lo son. Pensar distinto no es delito, ni debe ser reprimido el que disienta. Sobre la cifra debo decir que lamentablemente no es fija, ni disminuye. En la coalición por los derechos humanos y la democracia, conformada por todos los defensores de los presos políticos, defensores de derechos humanos y Ong`s, llevamos un control al respecto y en la actualidad tenemos cerca de 400 presos políticos en Venezuela.
-La cifra es dinámica, una suerte de “centrifuga penal” porque, en un momento por ejemplo, es posible que salgan 2, pero ese mismo día, por otro lado, entran 6, ello, además los casos, que a lo largo y ancho del país no son publicitados por temor a represalias. En síntesis, es una macabra cuenta… que pudiera superar los 400.
-¿Qué puede decirnos del caso del general Raúl Isaías Baduel y de otros cuya defensa tiene o tuvo en sus manos? Dentro del ordenamiento jurídico vigente, ¿qué derechos les son vulnerados a los presos políticos?
-El derecho a la defensa y al debido proceso, al respeto de su integridad física, y no ser objeto de torturas, tratos crueles, degradantes e inhumanos, a que le sean respetadas las visitas de familiares y abogados, entre otros.
-El general Raul Isaías Baduel –agrega el jurista-, continúa aislado de manera ilegal violándose de manera intolerable sus DDHH. “Se presume” que continúa en la llamada “La Tumba” del Sebin de Plaza Venezuela, ya van más de 100 días sin poder ser visitado por su familia, ni sus abogados, lo cual los preocupa y por ello han llegado a solicitar a las autoridades una “fe de vida” de su persona. Igual suerte vive en ese mismo lugar siniestro de tortura blanca, el capitán (Juan Carlos) Caguaripano, a quien mantienen igualmente en aislamiento.
-Todo lo que dice apunta a que la justicia penal en Venezuela contra opositores se utiliza con fines de venganza y que los derechos humanos no existen para ellos en Venezuela. ¿Podríamos resumirlo así?
-La crisis institucional, la falta de separación de poderes, que son el pilar fundamental de cualquier Estado democrático, y que vive el país en la actualidad, ha traído como consecuencia, que en la práctica se perciba que no existe la justicia, ni a quién recurrir.
-Es evidente la utilización de la justicia contra la disidencia, por la naturaleza de los juicios, los delitos imputados que ahora, novedosamente, no solo son los delitos políticos clásicos, sino que se usan hasta delitos comunes para procesar a personas por razones políticas, las detenciones arbitrarias, la negación del debido proceso, la complaciente actuación de los demás poderes que deben velar por el cumplimiento de la constitución y los tratados internacionales en materia de DDHH, y de su preeminencia en el país, y no lo hacen… Cuestión que también ha trascendido a la justicia penal militar, en la que han procesado de manera absolutamente ilegal no solo a nuestros militares institucionales por apegarse al artículo 328 constitucional, sino a “civiles” por delitos militares, cuestión proscrita, prohibida, a nivel nacional e internacional, pero que en el plano internacional, en instancias protectoras de los DDHH, le han señalado al Estado venezolano “en reiteradas oportunidades” ante diversas denuncias, que cumpla con la ley y los tratados internacionales que lo prohíben.
VIOLACIÓN DEL DEBIDO PROCESO
-Y sobre las limitaciones que tienen los abogados para cumplir con su trabajo, el riesgo que tienen, ¿qué nos puede decir?
–Nosotros debemos sortear muchos obstáculos derivados del abuso de poder, ya que no se nos permite ejercer a plenitud el derecho a la defensa de nuestros patrocinados, cuando son incomunicados o cuando se les viola el debido proceso. Lamentablemente a principios de año, se desató una nueva forma de persecución contra la disidencia, en este caso además de atentados, amenazas, ahora se comenzó a perseguir a los abogados por los casos que manejan, como se hizo en un tribunal militar contra el doctor Luis Argenis Vielma, uno de los defensores del capitan Caguaripano. Esto no debe ocurrir, es como si en un conflicto armado, algún miembro de la Cruz Roja es atacado… Nosotros somos defensores privados, y defensores de DDHH, es nuestra labor, es absolutamente técnica y debe ser respetada.
-Por último, la situación de los presos políticos ha sido denunciada de forma reiterada en instancias internacionales, pero para muchos eso no ha permitido ni su liberación ni siquiera que se respeten sus derechos humanos. ¿Es así, qué se puede esperar?
-A pesar de que se pueda pensar que las denuncias nacionales e internacionales, para proteger los DDHH de nuestros presos políticos no han servido, es todo lo contrario. Por eso no desmayaremos y seguiremos haciendo nuestro trabajo con la convicción de que vamos a lograr la libertad de los presos políticos, y el respeto a los DHH en nuestro país, mediante el rescate de la institucionalidad.
-Precisamente –apunta Mora Tosta-, poco a poco en virtud de este trabajo, constante, dedicado, y reiterado hemos logrado que la comunidad internacional volteara su mirada hacia Venezuela y conociera la verdad, la realidad, la dura realidad que enfrentan los presos y perseguidos políticos, sus familiares y allegados, además de la dramática crisis humanitaria alimentaria, de medicamentos y económica que sufre el pueblo venezolano, que se ha traducido en un éxodo sin precedentes y la existencia de una diáspora venezolana. Todo ello ha conllevado a pronunciamientos y respuestas de la comunidad internacional en este sentido. Finalmente debo decir que las violaciones a los DDHH y los crímenes de lesa humanidad, no prescriben; más temprano que tarde estoy seguro se hará justicia.
Twitter: @Alconde