Por.- Alex Vallenilla / @alexvallenilla
-Las ganancias de la enorme red de contrabando se traducen en pérdidas para Pdvsa, que se cubren con préstamos del BCV y se genera inflación que paga el ciudadano común
Un litro de gasolina en Venezuela, según el tipo que sea cuesta 1 ó 6 bolívares en cualquier estación de servicios. Al final de la larga cadena de comercialización ilegal que ocurre en la frontera con Colombia en su mayoría, ese litro de combustible lo termina pagando un consumidor en el vecino país en 1.784.676,35 bolívares. Lo que explica la situación que se vive al margen de las autoridades, las cuales en el lucrativo negocio serían cómplices.
Si un vehículo colombiano utiliza sólo gasolina de contrabando procedente de Venezuela, estaría recibiendo actualmente un subsidio según el precio del dólar, de 249.900 bolívares por cada litro. Esto porque la diferencia de precios entre la gasolina colombiana y la venezolana que es de contrabando, es de 0,14 dólares por litro a favor del consumidor gracias a la política de precios de Pdvsa. Un vehículo con tanque de 35 litros, recibiría cada vez que llena, un subsidio de 8,75 millones de bolívares, si se trata de un taxista que podría repostar con un día alterno, el subsidio al mes se ubica en 262,5 millones de bolívares, por lo que al año el subsidio se ubica en 3.150 millones de bolívares.
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Las fuertes pérdidas que se generan en la industria petrolera venezolana, se convierten en ganancias de toda la red de contrabando desde las estaciones de servicio y de muchos centros de distribución de gasolina que cargan las propias gandolas de Pdvsa y que terminan transportando el combustible a la frontera. Estas pérdidas las cubre el Estado con préstamos del Banco Central de Venezuela (BCV), que se generan con dinero que emite el mismo ente monetario, cuando ese dinero entra a circular en el sistema se genera inflación, lo que hace que los venezolanos paguen con altos precios en otros bienes lo que realmente cuesta el combustible.
La situación económica con el bolívar también comienza a afectar ese sistema, en regiones dentro de Venezuela, por la escasez de dinero efectivo el contrabando se comienza a realizar con pesos colombianos, un litro de gasolina estaría siendo pagado en los centros de acopio en 150 pesos de la moneda del vecino país.