Por Francisco Poleo
El hambre crece en Venezuela como en ningún otro país de Latinoamérica. La malnutrición llega a niveles récord. Esos datos están contenidos en el último informe de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), realizado en conjunto con el Programa Mundial de Alimentos y la Organización Panamericana de la Salud.
Ese estudio se refiere al bienio 2016-2018. En el bienio 2014-2016 el régimen, que dice que no dispone de fondos para alimentar y curar a su población por presuntos bloqueos internacionales, transfirió a Singapur títulos de deuda venezolana por un valor de 100,000,000,000.00 USD (100 mil millones de dólares estadounidenses).
Documentos a los cuales tuvo acceso Zeta señalan que el Banco Central de Venezuela (BCV) autorizó el 12 de noviembre del 2014 una operación a nombre de la empresa española Paltel Business SL en base a un bono del Estado venezolano valorado en 100,000,000,000.00 USD (100 mil millones de dólares estadounidenses) con la idea de abrir una línea de crédito en Singapur con soporte en que unos títulos de deuda daría una rentabilidad del 76.5% durante 18 meses. Es decir, una rentabilidad de 76,500,000,000.00 USD (76 mil millones de dólares estadounidenses).
El presidente del BCV en ese momento era Nelson Merentes. Fue este funcionario quien autorizó personalmente la operación por parte de la institución bancaria venezolana. Del otro lado, como receptor de los fondos, figuró Paltel, una pequeña agencia de publicidad española sin trayectoria y cuyas cuentas señalan que no tenía capital alguno como para justificar una adjudicación de este tamaño, más allá de su oficio alejado del mundo financiero. Su representante y única dueña era Ana Berta González Quintas, una abogada española que residió en Miami al menos hasta el 2017 según documentación vista por Zeta.
“El Facilitador (BCV) otorga y el Beneficiario (Paltel) acepta en administración financiera el bono emitido por el BANCO CENTRAL DE VENEZUELA cuyo valor facial es 100,000,000,000.00 USD (cien mil billones de dólares estadounidenses) como primer tramo del bono”, se lee en el Master Financing Agreement oficial (Acuerdo Maestro de Financiamiento), firmado por Merentes y González Quintas en representación de sus respectivas partes.
El mismo documento firmado por Merentes autoriza a Paltel a utilizar la emisión de ese bono global “como un instrumento de compromiso para levantamiento de fondos, créditos e inversiones en cualquier manera legal para extracción del máximo beneficio”. El título de deuda se colocó en el Standard Chartered Bank Singapore Limited.
Siempre según el acuerdo oficial, de “la línea de crédito (Standart Chartered Bank Singapore Limited), que estará emitida tras la emisión de MT799 y MT760 por el BCV, se espera un retorno del 76.5 % LTV (76,500,000,000.00)”.
MT799 y MT760 son autorizaciones emitidas por los bancos a otros bancos a la hora de autorizar transacciones entre ellos.
Ese mismo 12 de noviembre del 2014 se entrega el Título de Propiedad de los valores a Paltel Business SL.
Sobre Paltel
Paltel Business S.L. es una empresa española registrada el 13 de noviembre del 2006 con un capital inicial de 3,010.00 euros (3 mil 10 euros) cuyo domicilio fiscal es la avenida Modesto Lafuente, edificio 8, piso 2F, código postal 34002, en Palencia, España. Lo más relevante del edificio donde tiene su sede fiscal Paltel Business es que ahí funciona una sucursal de la red de mercados Mercadona, una modesta ubicación para una empresa a la cual le adjudicaron un negocio que daría un retorno de 76 mil 500 millones de dólares en 18 meses.
El objeto social de Paltel Business que consta en el Registro Mercantil de España no tiene que ver con la operación financiera que acordó con el BCV. Según la documentación legal, “constituye el objeto social de la misma (Paltel Business S.L.) el Marketing, Telémarketing, venta a comisión y publicidad. Quedan excluida todas aquellas actividades para cuyo ejercicio el ordenamiento jurídico exija requisitos especiales que no queden cumplidos por esta sociedad y si las disposiciones legales exigieran para el ejercicio de alguna de las actividades comprendidas en el objeto social algún titulo profesional, tales actividades deberán realizarse por medio de persona que ostente la titulación requerida”.
Es decir, Paltel Business era, a lo sumo, una agencia de publicidad.
La última vez que Paltel Business publicó en el Registro Mercantil sus cuentas fue en el 2012, poco antes de que se empezara a gestar el negocio con el BCV. Según las cuentas presentadas por la empresa en ese año, sus deudas a largo plazo eran de 20,100.00 euros (veinte mil cien euros), sus deudas a corto plazo eran de 10,590.00 euros (diez mil quinientos noventa euros) y sus activos corrientes eran de 299 euros (doscientos noventa y nueve euros). Poco tiempo después, esa misma empresa lograría una adjudicación de cien mil millones de dólares.
La empresa Paltel Business S.L. que firmó el acuerdo con el BCV era propiedad de la abogada española Ana Berta González Quintas. El 16 de julio del 2018 aparece publicado en el Boletín Oficial del Registro Mercantil español el “cierre provisional hoja registral por baja en el Índice de Entidades Jurídicas” de Paltel Business SL.
La operación en Singapur
¿Cómo hace una modestísima agencia de publicidad para recibir estas astronómicas cantidades? ¿Qué banco se presta para esto? La respuesta está en Singapur, país que ha sido denunciado por autoridades financieras como el nuevo gran paraíso fiscal.
Para abrir una cuenta en Singapur, Paltel Business SL recurrió al Standard Chartered Bank Singapur. Para esto, González Quintas contó con la ayuda del propio BCV, según documentación oficial de la entidad bancaria oficial venezolana. Al momento de abrir la cuenta, a González Quintas, una abogada española de pocos recursos que en ese entonces vivía en una cochera en Madrid, la recibió el entonces CEO (Presidente o Director General) del Standard Chartered Bank Singapur, el indio Neeraj Swaroop.
El Standard Chartered Bank Singapur es la sucursal en Singapur del Standard Chartered Bank, una entidad financiera británica.
Aunque el acuerdo entre el BCV y Paltel se firma el 12 de noviembre del 2014, la transferencia de los valores no se dio inmediatamente. Durante más de un año, el propio presidente del BCV lideró las gestiones para que esto fuera posible.
Según el contrato firmado entre el BCV y Paltel Business, los fondos recibidos por los intereses del bono serían utilizados para proyectos en Venezuela que no fueron especificados. El acuerdo tenía una validez de 18 meses durante los cuales se iría cobrando el 76.5% de los 100,000,000,000.00 millones de dólares adjudicados. Sin embargo, ¿qué pasó con ese dinero?
Venezuela tiene en estos momentos serios problemas para movilizar fondos debido a las sanciones internacionales en contra de algunos altos funcionarios del régimen y ha incurrido en default en algunos pagos de intereses de otros títulos.
Abrir la cuenta en Singapur no fue tarea fácil.
Según documento oficial, el 21 de enero del 2015 Merentes, entonces presidente del BCV, le notifica a González Quintas «de manera oficial» que “la firma de la Línea de Crédito otorgada a su empresa (Paltel Business) por el Standard Chartered Bank Singapore Limited, el día miércoles 28 de enero del presente año a las 03:45 de la tarde hora de Singapur, acto al que me complace anunciar que asistiré en compañía de una comisión designada para velar por el fiel cumplimiento de las obligaciones contraídas con la Nación y con personas involucradas que han hecho posible que esta Mega negociación se lleve a un feliz término (sic)”.
Pocos días después, el 01 de febrero del 2015, Paltel Business emite un documento legal en el cual se desvincula de operaciones que sean realizadas por el gobierno venezolano presumiblemente como consecuencia de la emisión del bono. Sin embargo, Paltel Business ratifica los términos del contrato suscrito con el BCV.
La Resolución de Directores de Paltel Business, equivalente a una Junta Directiva, deja claro en una Resolución Primera que su Consejo de Administración “se desvincula de los pagos otorgados al BCV y al Gobierno Venezolano”, en una Resolución Segunda “que dichos pagos serán directamente cubiertos en el debido momento por el Standart (sic) Chartered Bank Singapore” y en una Resolución Tercera “que todos y cada uno de los Acuerdos suscritos entre la mercantil Paltel Business Sociedad Limitada y el BCV se mantendrán conforme fueron realizados en su debido momento”.
En esa misma junta directiva de Paltel Business se concluye que la empresa “queda excluida y exonerada de cualquier responsabilidad en los Acuerdos que el BCV y el Gobierno Venezolano puedan contraer con terceras personas en virtud de las anteriores Resoluciones”.
La única persona directiva de Paltel Business era Ana Berta González Quintas.
Abogados consultados por Zeta indican que esta resolución de Paltel Business pudiera deberse a que dejaban en manos del gobierno venezolano la administración de la cuenta abierta en el Standard Chartered Bank Singapore.
La operación en Singapur tampoco se dio el 28 de enero del 2015. El 24 de febrero del 2015 hay otra comunicación del BCV a González Quintas, firmada también por Merentes, asegurando que la firma de la Línea de Crédito tendrá lugar el miércoles 04 de marzo de ese año.
Pero tampoco se firmó el 04 marzo del 2015. El 12 de agosto del 2015 Merentes vuelve a enviar carta oficial, con sello del BCV, a González Quintas, afirmando que el Standard Chartered Bank Singapore Limited había rechazado la firma de la Línea de Crédito “hasta tanto los valores (los bonos) no se encuentren en la cuenta correspondiente”. Según el entonces presidente del BCV, el retraso se debe a que el sistema Euroclear no había realizado la transferencia.
Euroclear es un sistema de pago y entrega que permite intercambiar títulos, bonos y dinero, lo cual garantiza a los operadores financieros tanto el envío como la recepción de los fondos. Junto a Clearstream, domina el sistema financiero de clearing o compensaciones internacionales.
El régimen de Venezuela ha tenido problemas recientemente con Euroclear. El 23 de julio del 2017 Nicolás Maduro, presidente de facto venezolano, aseguró que esa firma mantenía congelados 1 mil 650 millones de dólares del Estado venezolano. “Tenemos 450 millones de dólares en efectivo (…) a los 450 millones se suman 1 mil 200 millones en bonos, emitidos por la República, ya aceptados por agentes económicos (…)”.
Ese mismo 12 de agosto del 2015 que Merentes notifica a González Quintas que Euroclear no ha transferido los valores todavía, se tiene registrada una confirmación de transferencia de posiciones por 30,000,000,000.00 de dólares (30 mil millones de dólares) desde el Euroclear Bank al Standard Chartered Bank Singapore Limited.
Otras operaciones
Zeta tuvo acceso a documentos que prueban otras operaciones, no necesariamente de la misma naturaleza, ocurridas en las mismas fechas.
El BCV adjudicó a Paltel Business el 15 de octubre del 2014, casi un mes antes de que se firmara el acuerdo de los cien mil millones de dólares en bonos, cuatro certificados de oro por un valor total de 85,000,000.00 USD (85 millones de dólares estadounidenses). Los certificados son, cada uno, de 30,000,000.00 USD (30 millones de dólares estadounidenses), 15,000,000.00 USD (15 millones de dólares estadounidenses), 30,000,000.00 (30 millones de dólares estadounidenses) y 10,000,000.00 USD (10 millones de dólares estadounidenses).
Así mismo, según certificado de recepción de fondos al cual tuvo acceso Zeta, el 29 de enero del 2016 se recibió en la cuenta de Paltel Business en el Standard Chartered Bank Singapore un bono por 130,000,000,000.00 USD (130 mil millones de dólares estadounidenses). La transferencia fue ordenada por el BCV desde el Euroclear Bank.
El 29 de febrero del 2016 aparece registrada otra confirmación de transferencia de posiciones por un valor de 1,500,000,000.00 de dólares (1 mil 500 millones de dólares).