Los hechos muestran el fracaso de la diplomacia de Paz de Maduro. Su negligencia y sus omisiones son actos de traición a la patria. Foto: Su Noticiero

¡La AN cumple con su pueblo!

Por Williams Dávila

***Los hechos muestran el fracaso de la diplomacia de Paz de Maduro. Su negligencia y sus omisiones son actos de traición a la patria.

Se acerca la culminación de este año 2018 lleno de vicisitudes, tristezas y desencantos. Pero si algo salió a flote es la entereza del venezolano, que en cualquier lugar del planeta se incorpora y contribuye al crecimiento del PIB del país que nos recibe.

La divina providencia nos acompaña, porque Venezuela fue muy generosa con la inmigración que vino de Europa, América y Asia, huyendo de diversas catástrofes sociales, económicas y políticas. Se reincorporaron a la actividad requerida y obviamente contribuyeron decisivamente al desarrollo humano de nuestro amado país.

Producto de un régimen perverso se estiman que 5.4 millones de compatriotas podrían emigrar del país. Situación grave porque un talento o capacidad que emigra es un recurso irreemplazable que deja el país. La ignominia histórica de Maduro nunca lo abandonará, porque dentro de su estrategia está seguir lo que hizo Fidel Castro. No le interesa el éxodo de venezolanos. Solo le interesa perpetuarse en el poder.

Lo antes dicho subrayó la gestión que hicimos como diputados de la Asamblea Nacional. Algunos critican la institución, con razón o sin razón, pero olvidan logros que voy a reseñar someramente en el espacio internacional:

1- Derrotamos la pretensión del régimen de invisibilizar la realidad del éxodo venezolano. Contribuimos a despertar conciencia internacional mostrando que no era una simple movilización económica de venezolanos; sino un fenómeno humano que, de no tratarse como un tema de derechos humanos, colapsaría la región en la prestación de servicios públicos y en el fomento de brotes de xenofobia.

El “Grupo de Lima”, los congresos de Colombia, Argentina, Brasil, Chile, Paraguay, Uruguay, México, las embajadas, la OEA, OIM, OTCHA, Parlasur, las universidades, los foros académicos entre otros espacios, escucharon nuestros planteamientos por escrito; otros colegas hicieron lo suyo en otros escenarios.

Nuestros planteamientos iban dirigidos a crear conciencia acerca de que el venezolano que huía del país no era un simple migrante sino que era también un refugiado y así contribuimos a fortalecer la doctrina de la no devolución y de que los países receptores otorgarán la condición de refugiado, preferentemente.

Hicimos función de control en Roraima para evaluar in situ la realidad de los cientos de miles de venezolanos que pasan por Pacaraima en una misión aprobada en Parlasur,  producto de la ignominia de Maduro y sus secuaces.

Planteamos la flexibilidad migratoria en el encuentro de parlamentarios en Cúcuta y en el “Grupo de Lima”.

Hoy día la migración venezolana es de las más grandes de la historia en un país que no está en guerra con ningún otro país como Siria.

La AN se apersonó y allí está la impronta de la gestión legislativa que se hizo sin recursos ni apoyo del Estado; sólo prevaleció el amor al prójimo.

Que corrimos riesgos sí y muchos, pero es nuestro compromiso. La Asamblea General de la ONU, la decisión del Consejo de los DDHH de la ONU, la declaración de la Alta Comisionada de los DDHH, la solicitud de investigación por delitos de Lesa Humanidad ante la CPI, atestiguan cómo hecho lo que la AN ha realizado para denunciar, documentar y divulgar las graves violaciones de los derechos humanos que implican la responsabilidad del Estado, y de los altos funcionarios del Estado incursos en delitos tipificados en el Estatuto de Roma.

En años anteriores la Comunidad Internacional no había tomado conciencia de la magnitud del peligro que corría la democracia en América con la situación venezolana, fue después del 2106 cuando presidía la AN Henry Ramos Allup que la OEA cambió, que la UE y los EEUU comenzaron con su programa de sanciones a los violadores de los derechos humanos y los corruptos que se robaron los dineros del pueblo en PDVSA, CLAPS, blanqueo de capitales etc.

En ese cambio tuvo influencia la AN y en 2018 se profundizaron, gracias al esfuerzo y riesgo de todos nosotros los diputados de la AN.

2- Defendimos la soberanía y la integridad territorial. Se creó la Comisión Especial para la Defensa del Esequibo que trabajó con criterio de Estado. La soberanía y la integridad están por encima de cuestiones políticas, ideológicas, grupales. Advertimos en tres acuerdos, 4 foros, comunicaciones al Alto Mando militar, reuniones con el Nuncio, embajada de USA, PNUD, Holanda, España, Academias, visita a la Isla nuestra de Anacoco, que si Maduro no actuaba con diligencia los resultados serían negativos.

Maduro, siguiendo a Chávez, abandonó lo que Rómulo Betancourt y Leoni hicieron. Chávez se dejó llevar por Fidel Castro y cambió en el 2004 la tradición diplomática de la democracia en relación al Esequibo y a la defensa, sin discusión ni controversia de la fachada Atlántica porque es territorio patrio. Es nuestro Delta del Orinoco.

Hoy día los hechos demuestran el fracaso de la diplomacia de Paz de Maduro. Su negligencia y omisiones son actos de traición a la patria y así lo dijimos varias veces. Hicimos llamados a la FANB para que cumplieran la LOFAN.

Reafirmamos nuestra posición: el “Acuerdo de Ginebra” es un instrumento del Derecho Internacional que debe respetarse y la fachada Atlántica es territorio patrio.

3- Se aprobó la “Ley de migración voluntaria de retorno”. Esta es una ley progresista que tiene un mensaje que, más temprano que tarde, producirá el cambio en Venezuela: y ese drenaje de talentos y capacidades regresarán a Venezuela a reconstruirla, una vez los factores objetivos que obligaron a refugiarse a millones de venezolanos en diferentes partes del mundo desaparezcan.

Son muchas las cosas que podemos escribir sobre los logros estratégicos. En este momento solo me refiero a algunos que hoy día marcan la agenda internacional con hechos y actos legislativos.

Seguiremos informando. ¡La AN cumple con su pueblo!