La inflación en septiembre fue del 2.4%, ligeramente superior a lo esperado, mientras los votantes siguen preocupados por el alza en el costo de vida.
El crecimiento de los precios al consumidor en Estados Unidos se desaceleró en septiembre al ritmo más bajo desde febrero de 2021, registrando un aumento interanual del 2.4%, según informó este jueves el Departamento del Trabajo. Aunque la cifra fue ligeramente superior a la expectativa del 2.3%, sigue representando una moderación respecto al 2.5% de agosto.
A nivel mensual, el índice de precios al consumidor subió un 0.2%, superando la proyección de un 0.1%. Los principales impulsores de este aumento siguen siendo los costos de la vivienda, que se incrementaron un 4.9% interanual, y los precios de los alimentos.
Impacto en la vida cotidiana
Aunque la inflación muestra señales de desaceleración, muchos estadounidenses continúan enfrentando precios más altos en bienes y servicios cotidianos. Desde principios de 2020, los precios en promedio han subido más de un 21%, lo que afecta considerablemente el poder adquisitivo. Algunos productos han visto aumentos aún mayores, lo que sigue siendo un punto crítico para los votantes de cara a las elecciones de noviembre.
El debate político sobre la inflación
La inflación se ha convertido en un tema central en la campaña electoral, con el expresidente Donald Trump culpando a la administración Biden-Harris por el aumento de los precios. Trump ha acusado a Kamala Harris, la candidata presidencial demócrata, de «no hacer nada» mientras se aprobaban gastos que, según él, contribuyeron al auge inflacionario. Sin embargo, los economistas no están completamente de acuerdo, señalando que factores como los problemas en la cadena de suministro y los cambios en el comportamiento del consumidor también han influido.
Trump ha prometido una serie de aranceles para impulsar el empleo y aumentar los ingresos, mientras que Harris ha propuesto medidas para limitar los aumentos de los precios de los alquileres y los alimentos, aunque algunos analistas cuestionan la viabilidad de estas políticas.
Percepciones divididas sobre la economía
Las encuestas muestran que Trump sigue liderando en la percepción de quién manejaría mejor la economía, aunque Harris ha reducido la brecha en algunas métricas. Mientras tanto, el país está dividido en cuanto a la valoración de la situación económica actual. Los republicanos registran su opinión más negativa en la historia reciente, mientras que los demócratas son tres veces más optimistas, según una encuesta de la Universidad de Michigan. Un respiro temporal para la administración Biden-Harris ha sido el descenso en los precios de la gasolina, que en comparación con el año pasado ha bajado unos 0.50 dólares por galón, según la Asociación Automovilística Estadounidense. Sin embargo, con los recientes conflictos en Medio Oriente, los precios podrían volver a subir, lo que agregaría más presión a la economía.