Nicolás Maduro aseguró este miércoles que su equipo mantiene un diálogo con los poseedores de bonos a los que han hecho una propuesta, que no detalló, para respetar las deudas.
«Nosotros tenemos diálogo con los tenedores de bonos y le hemos hecho una propuesta poderosísima para Venezuela honrar sus compromisos internacionales», indicó Maduro en un encuentro con el sector bancario del país caribeño transmitido por el canal estatal Venezolana de Televisión (VTV).
El gobernante no ofreció detalles sobre cuál sería la oferta presentada a los acreedores y tampoco si la han aceptado.
Añadió que los principales perjudicados por las sanciones impuestas por Estados Unidos son los poseedores de bonos, que han perdido una «millonada brutal» que «se pierde de vista».
«La otra vez, estábamos calculando en miles de millones de dólares que han perdido ellos (tenedores de bonos). Nosotros tenemos una propuesta para responder por esas obligaciones de Venezuela en el mundo internacional, pero el Gobierno de EE.UU., utilizando su posición de dominio sobre el sistema financiero y sobre el dólar, lo impide de manera criminal e inmoral», subrayó.
Maduro aseveró que, si levantan todas las sanciones «monetarias, financieras y bancarias» que pesan sobre la nación caribeña, responderían a los tenedores de bonos «al otro día».
«Estamos aquí listos, tenemos la propuesta muy sólida», apostilló.
El pasado 20 de enero, el Departamento del Tesoro de EE.UU. amplió por un año la protección de la empresa Citgo, propiedad de Petróleos de Venezuela (Pdvsa), frente a los acreedores de la petrolera estatal del país caribeño.
La directora de la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Tesoro, Andrea Gacki, emitió una notificación por la que autoriza extender hasta el 20 de enero de 2023 la licencia que prohíbe a los tenedores del bono de PDVSA 2020 ejecutar la garantía que les otorga la mayoría accionarial, protegiendo a Citgo.
La protección a Citgo, que está bajo el control del líder opositor venezolano Juan Guaidó al ser reconocido por Estados Unidos como «presidente interino» de Venezuela, ha sido prorrogada varias veces, aunque hasta ahora habían sido extensiones por un plazo más corto, de tres meses.
Específicamente, la licencia del Tesoro prohíbe las transacciones con el bono PDVSA 2020, que está en mora y tiene como colateral el 51,1 % de las acciones de Citgo, hasta el 20 de enero de 2023.
En octubre del 2019 vencía el pago de intereses del bono 2020 de Petróleos de Venezuela (PDVSA) por 913 millones.
Si el Gobierno venezolano no cumplía con el pago, los tenedores tenían el derecho de asumir el 51 % de las acciones de Citgo, que son la garantía de la emisión.
Otro guiño al sector financiero
El gobierno de Maduro anunció este miércoles la autorización de préstamos indexados en dólares y la reducción del encaje bancario como parte de un paquete de medidas orientadas al resurgimiento del crédito, prácticamente inexistente en el país.
«El presidente (Nicolás Maduro) ha tomado la decisión a invitarlos a que el 10% de las divisas que tienen en sus depósitos, de sus depositantes, ustedes puedan dar créditos en bolívares indexados al valor de la divisa acordada en las mesas de cambio», informó la vicepresidenta y ministra de Finanzas del régimen venezolano, Delcy Rodríguez, durante un acto en el palacio de Miraflores, en Caracas.
La medida ocurre en un país donde durante más de 15 años se restringieron las operaciones en dólares. El escenario cambió desde 2019 cuando el régimen de Maduro se vio forzado a aflojar los controles de cambio y de precios reinantes en la era chavista, así como a permitir una dolarización de facto como una «válvula de escape».
La abismal devaluación de la moneda local acabó con los créditos bancarios, incluso se dejaron de emitir tarjetas de crédito, por cuanto emitir préstamos en bolívares dejó de ser viable para los bancos pues las cuotas eran devoradas por la inflación.
Con esta medida «se faculta a los bancos que deseen utilizar un 10% de sus posiciones en divisas para dar créditos también, lo cual expande la base crediticia», señaló Maduro al dirigirse a un grupo de banqueros presentes durante el acto, transmitido por la televisión gubernamental.
Además, «se baja el encaje bancario del 85% al 73% para expandir la base crediticia», remarcó el mandatario.
La flexibilización en el encaje bancario «va a tener un impacto en la actividad crediticia», de acuerdo con Rodríguez.
La reducción del encaje bancario se aplicará por «un período de tiempo muy corto» que será renovado según «como se vaya desempeñando» hasta ir a «una flexibilización expandida en el tiempo», indicó la funcionaria, sin ofrecer más detalles.
En 2021, tras siete años de recesión consecutivos, Venezuela mostró una «moderada recuperación» de su economía, expresó Maduro, que apuesta por una era «postpetrolera» volcada a actividades productivas.
Venezuela salió en 2021 de su voraz ciclo de hiperinflación que comenzó en 2017, aunque el costo de vida sigue siendo muy alto y la inflación, que cerró el año en 686,4%, según el Banco Central (BCV), ha alcanzado incluso a los precios en moneda extranjera.
(Con información de EFE y AFP)