España teñida de rojo: Polvo del Sáhara inunda la península
*** Una gran cantidad de arena rojiza proveniente del Sáhara ha cubierto carros, calles y casas en España.
Por CASIMIRO BUENOSVINOS
Una gran cantidad de arena rojiza ha cubierto carros, calles y casas en la península ibérica. El polvillo se ha estado observando estos últimos días en diferentes puntos de España como Albacete, Murcia, Segovia. Poco a poco, se ha estado extendiendo a gran parte del país.
La responsable es la tempestad Celia, que ha desplazado el polvo sahariano y ha teñido el cielo de un tono rojizo totalmente sorprendente.
En varias provincias mediterráneas, en especial en Murcia y el sur de la Comunidad Valenciana, se está produciendo un «excepcional» episodio de polvo del Sáhara, fenómeno que no se producía con esta intensidad desde hace varias décadas. Los cielos se han teñido de naranja en muchos puntos de esas provincias ya se han trasladado al centro peninsular.
El fenómeno se dirige del sur al norte por el este del país, según fuentes de la Asociación de Geógrafos de España (AGE). Los expertos explican que el polvo está aprovechando el lado este de la tempestad que se ha formado en el suroeste para ascender hacia Europa occidental.
La llegada de una lengua de polvo en suspensión procedente del desierto del Sáhara, impulsada por los vientos de Celia, ha elevado a la categoría de «extremadamente desfavorable» la calidad del aire en amplias zonas del país. No es para menos: son muy altos los altos niveles de concentración de partículas PM10, afectando seriamente a la salud.
Paralelo a este fenómeno, se informó que España ha ascendido, por primera vez, al primer puesto del ránking mundial de países más contaminados del mundo. Este ranking está en actualización constante y demuestra lo perjudicial para la salud que es ahora mismo el aire en suspensión.
Autoridades sanitarias recomiendan a la población tomar precauciones como evitar la exposición prolongada al aire exterior, mantener las ventanas cerradas y no realizar esfuerzos físicos al aire libre.
Si hay bebés, menores, o mayores en casa, o con problemas de salud, no abrir las ventanas si no es imprescindible.