*** El rey emérito Juan Carlos I no tendría inmunidad en la demanda presentada en Londres por su ex amante Corinna Larsen.
Por Irma Locantore
Un juez londinense rechazó este martes que el Rey Emérito, Juan Carlos I, apele el fallo que dictó que no tiene inmunidad ante la demanda por presunto acoso presentada en Inglaterra por su ex amante Corinna zu Sayn-Wittngstein.
Sin embargo, el ex monarca podrá pedir permiso para apelar ese dictamen ante la Corte de Apelación.
Corinna acusa a Juan Carlos I de haberla sometido a «acoso» desde 2012 hasta el presente, personalmente o a través de «agentes» a su servicio. Esas acciones, según la demandante, «amenazaron» su seguridad y la de sus hijos.
La defensa del demandado notificó que pedirán autorización para recurrir a la Corte de Apelación «lo antes posible» y, si esta corte lo autoriza, presentarán el recurso antes del 30 de mayo. Se supo que el juez Matthew Nicklin, del Tribunal Superior de Londres, rechazó el pedido del Rey Emérito pues los actos que se le atribuyen fueron a nivel personal y no de carácter de Estado.
Sin embargo, la defensa de Juan Carlos I estima que lo ocurrido antes de su aplicación -entre 2012 y 2014- podría considerarse que ocurrieron durante una posición de autoridad, con lo cual podría aplicarse la inmunidad, además cuestionan la opinión de Nicklin de que el emérito no forma parte de la Casa del Rey aunque sea de la familia.
Los abogados de Corinna zu Sayn-Wittngstein pidieron en esta sesión que la parte contraria se haga cargo de las costas judiciales por 230.000 libras (299.000 euros), pero el juez Nicklin considera que este aspecto se dirimirá más adelante y puntualizó que ambas partes «tienen recursos suficientes».
En diciembre pasado los abogados del padre de Felipe VI sostuvieron que Juan Carlos I no podía ser procesado al ser miembro de la Familia Real española y ex jefe de Estado, por sus actos cometidos en parte cuando aún era rey de España. También expusieron que las cortes inglesas no tienen jurisdicción sobre la demanda y que el emérito goza de inmunidad en virtud de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas y también de la ley británica sobre Inmunidad, que hace referencia a la inmunidad de extranjeros.
Corinna zu Sayn-Wittngstein y Juan Carlos I iniciaron una relación en 2004 que finalizó en 2009 luego que la ex amante conociera que el emérito le era infiel, según la defensa de Corinna. Luego mantuvieron una amistad tras la ruptura y en 2011, según la parte demandante, Juan Carlos I le hizo una serie de regalos, como joyas, obras de arte y también 65 millones de euros en junio de 2012, año en que el emérito intentó reiniciar la relación sentimental, pero la empresaria lo rechazó, de acuerdo con su versión.