*** Luego de haberse convertido en el socio mayoritario tras comprar el 9% de las acciones de Twitter, ahora Musk lanzó una oferta mil millonaria para convertirse en apoderado total de la red social.
Por Luis Camacho
El magnate sudafricano Elon Musk sorprendió a medio mundo luego de anunciar su firme intención de comprar la red social Twitter por una suma mil millonaria.
Musk anunció que pagaría US$54,20 por acción, elevando el valor de la firma a US$ 43.000 millones.
El 4 de abril, Elon informó que tenía una participación del 9,2% en Twitter, lo que le convertía en el mayor accionista de la empresa. Pero su gloria fue efímera. Cuatro días más tarde fue derribado cuando Vanguard Group anunció que aumentaba su posición la red del pajarito hasta el 10,3%.
El también presidente ejecutivo de Tesla también tuvo que replicarle al príncipe saudí Alawaleed bin Talal, quien rechazó su oferta de compra de Twitter por 43.000 millones de dólares.
«No creo que la oferta propuesta por Elon Musk (54,20 dólares) se acerque al valor intrínseco de Twitter dadas sus perspectivas de crecimiento», tuiteó Alaweed el jueves. «Siendo uno de los mayores accionistas de Twitter, [Kingdom Holding Company] y yo rechazamos esta oferta».
Alaweed posee una participación del 4,45% en Twitter, mientras que Kingdom Holding, la empresa de la que es propietario, posee el 0,72% de la compañía.
«Interesante», respondió sin reparos Musk en Twitter. «Sólo dos preguntas, si se me permite. ¿Qué porcentaje de Twitter posee el Reino, directa e indirectamente? ¿Qué opina el Reino sobre la libertad de expresión?»
Musk dejó claro este jueves que, en caso de no aceptarse su oferta, «necesitaría reconsiderar» su posición como accionista.
Un documento emitido por el regulador financiero de Estados Unidos parece revelar los mensajes con los que Musk se dirigió a la junta directiva de Twitter, anunciando su idea de adquirir la compañía el pasado fin de semana.
En sus mensajes, Musk aseguró no «estar jugando un partido de ida y vuelta» e insistió que a los accionistas les «encantaría el alto precio» que estaba ofreciendo por la compañía.
«Invertí en Twitter porque creo en su potencial para ser la plataforma de la libertad de expresión alrededor del mundo, y creo que la libertad de expresión es un imperativo social para una democracia funcional», dijo Musk, según el documento del regulador financiero estadounidense.
«Sin embargo, desde mi inversión me he dado cuenta que la compañía no hará prosperar ni servirá a este imperativo social en su forma actual. Twitter necesita transformarse en una empresa privada. Twitter tiene un potencial extraordinario. Lo voy a desbloquear», añadió.
Twitter ofreció a Musk un puesto en su junta directiva tras conocerse que había adquirido el 9,2% de la compañía. Dicho puesto se iba a hacer efectivo el pasado fin de semana, pero Musk decidió rechazarlo.
Por su parte Parag Agrawal, presidente ejecutivo de la red social, tuiteó que la decisión de Musk de no tomar un puesto en la junta directiva era «lo mejor».
«Valoramos y siempre valoraremos los aportes de nuestros accionistas, estén en nuestra junta o no. Elon es nuestro mayor accionista y permaneceremos abiertos a sus aportes», dijo.