Muere presidente de Lukoil

Se “suicida” otro oligarca ruso, y van diez

*** El presidente de Lukoil se suma a la lista de potentados rusos que han caído desde que empezó la invasión a Ucrania.

Por José Piñeiro

Ravil Maganov, presidente de Lukoil, la mayor petrolera privada rusa, murió este jueves tras caer por una ventana del Hospital Clínico Central de Moscú, donde estaba ingresado por un ataque cardíaco.

La agencia rusa TASS definió el caso como una «una muerte por suicidio». Maganov, de 67 años, era contrario a la invasión rusa de Ucrania. En marzo, su compañía pidió el «cese inmediato del conflicto» y una resolución de la guerra «mediante un proceso de negociación y a través de vías diplomáticas».

El fallecimiento de Maganov, no se trata de un caso aislado; diez oligarcas rusos han muerto en extrañas circunstancias desde que comenzó la invasión de Ucrania. El pasado 6 de junio dos altos cargos de la popular red social VK, Vladímir Gabrielyan, director general adjunto de VKontakte, y su jefe de adquisiciones, Sergey Merzlyakov, murieron en un accidente de coche durante una expedición por la costa del mar Blanco, según informó la agencia RIA Novosti. El vehículo todoterreno Sherp en el que viajaban volcó al cruzar el río Bugryanitsa y ambos hombres fallecieron. Los cuerpos fueron encontrados en la orilla del río.

Por otro lado, el ex gerente principal de Lukoil, Alexander Subbotin, fue el séptimo magnate ruso encontrado muerto el 8 de mayo en la casa de un chamán en Mytishchi, una ciudad al noroeste de Moscú, según la agencia de noticias rusa TASS. Supuestamente, había ido hasta allí para obtener una «cura contra la resaca», que incluía veneno de sapo. Según TASS, el chamán realizó una pequeña incisión en la piel de Alexander Subbotin para inyectar veneno de sapo e inducir así el vómito. Sin embargo, en vez de vomitar, el multimillonario comenzó a experimentar fuertes dolores en el pecho y el chamán le recomendó que se fuera a casa a descansar. A la mañana siguiente fue encontrado muerto en el sótano de un supuesto ataque al corazón.

Además, el pasado 19 de abril dos oligarcas rusos mataron a sus familias y después se suicidaron. Uno de ellos, Sergey Protonsenya, que fue vicepresidente del gigante ruso del gas natural Novatek durante siete años, se encontraba de vacaciones en Lloret de Mar (Gerona) y los Mossos trataron lo ocurrido como un caso de violencia de género. Sergey Protonsenya mató a su mujer y a su hija de 16 años a cuchilladas y hachazos en una villa de lujo que habían alquilado. Después, se dijo que se había suicidado ahorcándose en el jardín. Su hijo Fedor rechazó públicamente la teoría. Ese mismo día, Vladislav Avayev, exfuncionario del Kremlin y exvicepresidente de la compañía estatal de gas Gazprombank, fue encontrado muerto en su apartamento de Moscú junto a los cuerpos de su mujer Yelena, de 47 años, y su hija menor, María, de 13. El cadáver del hombre fue hallado con una pistola en la mano y los tres cuerpos presentaban heridas de bala.

También es destacable la muerte de Vasily Melnikov, que según el periódico ruso Kommersant fue encontrado muerto en su lujoso apartamento de Nizhny Novgorod el 24 de marzo. El multimillonario era propietario de la empresa de suministro de equipos médicos Medstom, la cual había sufrido significativas pérdidas debido a las sanciones occidentales. Vasily Melnikov, su esposa Galina y sus dos hijos, de 10 y 4 años, fueron encontrados todos muertos. Los investigadores concluyeron que Vasily Melnikov apuñaló a su familia antes de arremeter contra sí mismo.

Otro fallecimiento inesperado fue el de Mikhail Watford, que fue encontrado ahorcado en el garaje de su casa en Surrey (Inglaterra) el 28 de febrero, según la BBC. Mikhail Watford, que había cambiado su nombre de Tolstosheya original, nació en 1955 en la entonces Ucrania soviética y se había hecho un nombre después de convertirse en un magnate del petróleo y el gas. A principios de la década de los 2000 se mudó a Reino Unido con su esposa.

Alexander Tyulyakov también fue encontrado ahorcado, pero en su caso en el garaje de una casa de campo cerca de San Petersburgo el 25 de febrero, según Novaya Gazeta. La Policía le dijo a este medio ruso que encontraron una nota de suicidio junto a su cuerpo. Alexander Tyulyakov, de 61 años, era ejecutivo del gigante energético ruso Gazprom.

Leonid Shulman fue la primera muerte vinculada al gigante energético ruso Gazprom y ocurrió poco antes de que comenzara la invasión rusa de Ucrania. Este alto ejecutivo fue hallado muerto en el baño de una cabaña en Rusia y cerca de su cuerpo se encontró una nota de suicidio que decía que no quería ser una «persona discapacitada» o una «carga» para su familia y se quejaba de un dolor insoportable en la pierna que tenía lesionada, informaron los medios rusos Novaya Gazeta y 78.ru.