Tres minutos de silencio precedieron al comienzo del acto y, después, sonaron sirenas y bocinas en Pekín y en otras ciudades chinas durante otros 180 segundos.
Por José Piñeiro
El presidente chino, Xi Jinping, describió al fallecido líder Jiang Zemin como «un prestigioso líder y un gran marxista, diplomático y guerrero comunista» que lideró China en una etapa de «desafíos sin precedentes», durante una ceremonia de conmemoración celebrada este martes en Pekín.
Al acto, celebrado en el Gran Salón del Pueblo, situado en la plaza de Tiananmen, asistió la viuda de Jiang, Wang Yeping, pero no acudieron, aparentemente, ni la mano derecha de Jiang durante parte de su liderazgo, Zhu Rongji, ni su sucesor Hu Jintao, que no fueron vistos durante la retransmisión.
Hu, expulsado durante el XX Congreso del Partido Comunista Chino, sí estuvo presente este lunes durante la incineración de Jiang.
Tres minutos de silencio precedieron al comienzo del acto y, después, sonaron sirenas y bocinas en Pekín y en otras ciudades chinas durante otros 180 segundos. Xi subrayó la persistencia de Jiang en la «apertura y reforma económica» y lo elogió por supervisar durante su mandato la recuperación por parte de China de las antiguas colonias portuguesa y británica de Macao y Hong Kong.
El mandatario señaló la época de «desafíos sin precedentes» a los que se enfrentaba China a finales de los 80 y principios de los 90, tras la cual Jiang accedió al poder. El actual líder apuntó la «visión» de Jiang para «conseguir un país próspero» y su liderazgo para que China ingresase en la Organización Mundial del Comercio.
Asimismo, Xi, que llevaba un brazalete negro, agradeció al fallecido expresidente la «aclaración de la relación entre el socialismo, el mantenimiento de la estabilidad y el desarrollo económico». El presidente chino cerró su discurso deseando «eterna gloria al camarada Jiang Zemin». Tras ello, los asistentes hicieron tres reverencias y escucharon La Internacional.