Nicolás Maduro se refirió a las detenciones que se han llevado a cabo recientemente como parte de la guerra interna en el régimen. Durante una reunión con la Dirección Nacional del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Maduro pidió un «castigo ejemplar» para todos los «bandidos y corruptos», entre los que destacó hay «importantes empresarios, muy importantes gerentes, altos funcionarios del Estado y diputados».
En particular, Maduro se refirió al caso del alcalde chavista del municipio Santos Michelena del estado Aragua, Pedro Hernández, de quien dijo que «está comprobado plenamente en las investigaciones sus vínculos directos con la banda del criminal, del asesino, alias El Conejo. Sus vínculos múltiples, sus negocios. ¡Una cosa increíble!».
Estas declaraciones se producen en medio de la investigación y detención de varios funcionarios y empresarios acusados de corrupción y legitimación de capitales en Venezuela. Entre los detenidos se encuentra el empresario Rafael Guillermo Perdomo Rodríguez, propietario de la Constructora HP, y el diputado chavista y exministro de Educación, Hugbel Roa. Además, el ahora exministro de Petróleo, Tareck El Aissami, presentó su renuncia tras la detención de varios jerarcas de su entorno por presunta vinculación con el supuesto robo de 3 mil millones de dólares provenientes de la venta de petróleo venezolano.