No defraudó el Real Madrid en casa. Los merengues se impusieron 2-0 al Chelsea en el primer partido de los Cuartos de Final de la Champions League en su mítico estadio, el Santiago Bernabéu. Karim Benzema, el incombustible, el de siempre, anotó el primer gol a los 21 minutos, mientras que Marco Asensio selló el segundo con un zurdazo desde el borde del área. Los blancos fueron superiores durante todo el encuentro, aunque el resultado no reflejó la amplia superioridad. Además, el Chelsea jugó la última media hora en inferioridad numérica tras la expulsión de Ben Chilwell por un agarrón infantil a Rodrygo.
Benzema, al que le costó arrancar la temporada, vio cómo llegó el momento cumbre de la zafra y se puso los patines. En los últimos partidos, el eterno 9 madridista es el hombre más en forma. Los dirigidos por Carlo Ancelotti confían en la magia de la camiseta blanca en las noches europeas. Si siguen así, no es una quimera pensar en la decimoquinta Champions.
Aparte de Benzema, el Madrid contó, como casi siempre, con el látigo incesante de Vinicius en la banda, la seguridad imperial de Militao en el centro de la defensa y el escudo impenetrable de Courtois en la portería. Así, es muy difícil tumbar al equipo más laureado en Europa.
La victoria del Real Madrid representó la segunda derrota consecutiva del Chelsea bajo el mando del nuevo técnico técnico interino, Frank Lampard, quien reemplazó a Graham Potter en medio de una mala racha de resultados. Lampard buscará revertir la situación en el partido de vuelta que se jugará en Stamford Bridge la próxima semana. Los londinenses tendrán que mejorar un mundo.
La victoria del Madrid en el partido de ida ante el Chelsea, uno de los equipos más poderosos del fútbol inglés, llena de optimismo a los fanáticos merengues y pone de manifiesto el buen momento del equipo dirigido por Ancelotti en la competición más importante a nivel de clubes en Europa.