Nicolás Maduro arremetió este jueves en contra de la Administración del presidente Joe Biden, al mandar a largarse “al carajo” al funcionario del Departamento de Estado estadounidense que advirtió que Estados Unidos reforzará las sanciones en contra del régimen chavista si no hay avances en la negociación en México o si recrudece la persecución contra líderes opositores venezolanos.
“Ayer un vocero gringo salió a amenazar a Venezuela. Salió a decir que si Venezuela no avanza en los diálogos políticos con el sector bandido, corrupto y vende patria de la Plataforma Unitaria, ellos tomarían represalias y sanciones contra nuestro país. Yo le digo al vocero gringo: ¡vocero gringo, lárgate bien al carajo porque a Venezuela se respeta! No aceptamos amenazas del Gobierno de los Estados Unidos. Aquí estamos de pie por esfuerzo propio y seguiremos avanzando por esfuerzo propio. Venezuela no acepta amenazas de nadie”, expresó durante un mitin con motivo de los 21 años del retorno de Hugo Chávez al poder tras los sucesos del 11 de abril.
El miércoles un portavoz estadounidense reiteró la postura del Departamento de Estado hacia Venezuela. “Hemos sido muy claros: revisaremos y ajustaremos nuestra postura de sanciones en caso de que el régimen de Maduro no negocie de buena fe, cumpla con sus compromisos o aumente la opresión de los activistas políticos”, afirmó.
Ante esto, Maduro aseguró que “no hay vocero imperialista que intimide a los venezolanos y venezolanas” y a su régimen. “Así que imperialismo, trágate tus palabras, cómete tus palabras, que Venezuela seguirá su rumbo en el siglo XXI”, insistió.
Las tensiones entre Estados Unidos y Venezuela se han mantenido en los últimos años debido a la crisis política, económica y social en el país sudamericano, que ha llevado a una gran cantidad de ciudadanos a abandonar el territorio. Las sanciones económicas impuestas por Estados Unidos han sido criticadas por algunos sectores como una medida que perjudica a la población en general, mientras que otros argumentan que son necesarias para presionar al gobierno de Maduro.