Publicado en dw.com
Bajo la presión de Occidente, Pekín ha reforzado su estrecha asociación con Moscú en las últimas semanas. Expertos dicen que Beijing todavía está tratando de usar un «enfoque de doble vía» para maximizar sus intereses.
Funcionarios de alto nivel de China y Rusia celebraron reuniones en Beijing y Moscú para profundizar los lazos en una serie de áreas. El viernes 26 de mayo de 2023, el enviado especial de China para asuntos euroasiáticos Li Hui, llegó a Moscú, donde se reunió con el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov.
Para empezar, Lavrov culpó a Ucrania y los países occidentales de lo que calificó como «serios obstáculos» que impiden las conversaciones de paz entre Moscú y Kiev, al tiempo que reafirmó el compromiso de Rusia con «una resolución político-diplomática del conflicto». Además, Lavrov elogió a Beijing por su posición «equilibrada» sobre la invasión de Ucrania.
La reunión de Li en Moscú sigue a su gira por Europa, donde se reunió con funcionarios de varios países europeos. Luego de una reunión con el funcionario chino en Bruselas el jueves, Enrique Mora, funcionario de política exterior de la UE, dijo que la Unión Europea espera que China ayude a presionar a Rusia para que termine la guerra en Ucrania retirando sus tropas de los territorios ucranianos. Funcionarios de Ucrania y Polonia expresaron mensajes similares.
Si bien China esperaba que el viaje de Li disipara las dudas sobre su credibilidad como parte neutral en la guerra, algunos analistas dicen que los países europeos recibieron a Li con frialdad. «Cuando vemos las lecturas presentadas por los países europeos, es bastante obvio que Europa rechaza el documento de posición de 12 puntos de China sobre la guerra de Ucrania”, observa Justyna Szczudlik, analista de China en el Instituto Polaco de Asuntos Internacionales (PISM).
Según ella, Ucrania, Polonia y la UE enviaron a China un mensaje bien coordinado que enfatiza que Rusia es el agresor y que la comunidad internacional debe apoyar a Ucrania con base en el plan de paz presentado por el presidente ucraniano Volodimir Zelenski.
«Desde el punto de vista chino, el viaje de Li es un fracaso, porque los europeos no lo perciben como un negociador de la paz que podría iniciar algo», dice a DW.
Intentos de profundizar seguridad y lazos económicos
El 24 de mayo, el primer ministro ruso, Mijail Mishustin, el funcionario ruso de más alto rango en visitar China desde que comenzó la guerra de Ucrania, firmó una serie de acuerdos con Pekín para fortalecer aún más la cooperación en inversión comercial, facilitar la exportación de productos agrícolas rusos a China y profundizar los intercambios deportivos.
Durante su reunión con el primer ministro chino Li Qiang, Mishustin dijo que las relaciones entre Moscú y Beijing estaban «a un nivel sin precedentes».
Además del viaje de Mishustin a China, el jefe del consejo de seguridad de Rusia, Nikolai Patrushev, sostuvo conversaciones con el principal funcionario de seguridad de China, Chen Wenqing, en Moscú. Si bien las conversaciones se llevan a cabo todos los años, los expertos creen que el momento de la conversación y otros intercambios bilaterales se deben al deterioro de las relaciones entre Rusia y Estados Unidos, así como entre China y el país americano.
En el comunicado emitido al final de la cumbre del G7 en Hiroshima el fin de semana pasado, los líderes prometieron nuevos pasos para limitar la capacidad de Rusia para financiar la guerra en Ucrania, al tiempo que reconocieron la necesidad de contrarrestar el uso de la coerción económica por parte de China contra otros países.
Cuando se juntan la invasión de Ucrania por parte de Rusia y la necesidad de lidiar con el ascenso de China, China se ve incentivada a consolidar y mejorar sus relaciones con Rusia, que ya son bastante sólidas», dice Alexander Korolev, experto en relaciones chino-rusas de la Universidad de Nueva Gales del Sur, a DW.
Sin embargo, otros analistas creen que «agrupar a China y Rusia» es contraproducente, ya que solo llevará a Beijing y Moscú a duplicar aún más su nivel de cooperación. «Cuantos más países (del G7) intenten mostrar ‘unidad’ contra China, China reforzará más sus lazos con Rusia», explica Zhiqun Zhu, profesor de Relaciones Internacionales en la Universidad de Bucknell, en Estados Unidos.
Un «enfoque de doble vía” sobre la invasión de Ucrania
Desde que Rusia invadió Ucrania en febrero pasado, China ha tratado de presentarse como neutral en el conflicto. Sin embargo, su negativa a condenar la invasión ha generado escepticismo en otros países sobre su verdadera postura.
Con ese escepticismo persistente en gran medida y la relación con Estados Unidos y sus aliados deteriorándose, Zhu explica a DW que China ahora estaba adoptando un «enfoque de doble vía» para manejar la guerra de Ucrania, el cual «está consolidando la asociación China-Rusia mientras intenta mediar entre Rusia y Ucrania».
En la reunión con el primer ministro ruso el miércoles, el presidente chino Xi Jinping dijo que China y Rusia deberían explorar nuevos vínculos económicos y prometió que ambos países se apoyarán mutuamente en temas de interés central mientras fortalecen la cooperación en los ámbitos multilaterales.
Korolev cree que si bien los dos bloques de poder, China y Rusia por un lado y Estados Unidos y sus aliados por el otro, se estaban volviendo más conflictivos, también hay muchos países que intentan no alinearse con ninguno de los lados. «Vemos muchos países que están en algún punto intermedio», apunta a DW.