El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dejó claro que la adhesión de Ucrania a la OTAN no sería un proceso fácil, afirmando: «Tienen que cumplir los mismos estándares. Es decir que no se lo vamos a hacer fácil».
Además, calificó el despliegue de ojivas nucleares rusas en Bielorrusia, acordado por los presidentes de Rusia, Vladimir Putin, y Bielorrusia, Alexander Lukashenko, como «totalmente irresponsable». Este acuerdo permitiría a Rusia utilizar el territorio de Bielorrusia para atacar Ucrania.
Biden hizo estas declaraciones antes de la próxima cumbre anual de la OTAN, que se celebrará en Vilnius, Lituania, del 11 al 12 de julio. En esta reunión, Ucrania no será invitada a unirse a la alianza militar, según anunció el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, aunque mantuvo la posibilidad de que Ucrania pueda convertirse en miembro en un futuro.
Por otra parte, Finlandia se unió a la OTAN como su 31° miembro el 4 de abril, mientras que Suecia sigue esperando la aprobación de dos miembros, Turquía y Hungría, para unirse a la alianza. Ambos países nórdicos, tras décadas de neutralidad desde el fin de la Guerra Fría, anunciaron su candidatura el mes pasado en respuesta a la invasión rusa de Ucrania y a la demanda de Moscú de detener cualquier expansión de la alianza.