Trofeo

¡Verstappen imbatible! Los demolió en el GP de Hungría pero Norris le volvió trizas el trofeo

El piloto neerlandés Max Verstappen (Red Bull) obtuvo una cómoda victoria este domingo en el Gran Premio de Hungría, el undécimo del año, que se disputó en el Hungaroring, el circuito de las afueras de Budapest reforzando aún más su liderato en el Campeonato Mundial de Pilotos de la Fórmula 1.

Verstappen, de 25 años de edad, firmó su novena victoria de la temporada, la cuadragésima cuarta en la F1, al ganar por delante del inglés Lando Norris (McLaren), quien repitió el segundo puesto que obtuvo en Silverstone (Gran Bretaña), hace dos semanas, y del otro Red Bull, el del mexicano Checo Pérez, quien arrancó noveno y avanzó seis plazas para acabar tercero.

Con esta victoria del astro neerlandés, Red Bull batió el récord histórico de triunfos seguidos en la Fórmula 1 de McLaren, que en 1988 ganó las once primeras de ese año.

La escudería austriaca se anotó las once primeras de esta temporada; y añadió la de la última carrera del año pasado, que también ganó ‘Mad Max‘.

El séptuple campeón inglés Lewis Hamilton (Mercedes), que había arrancado desde la ‘pole‘, acabó cuarto, un puesto por delante del otro McLaren, el del australiano Oscar Piastri.

El otro Mercedes, el del inglés George Russell, concluyó sexto en el Hungaroring, una plaza por delante del monegasco Charles Leclerc (Ferrari), que se clasificó por delante de su compañero español y del doble campeón mundial asturiano.

El canadiense Lance Stroll, compañero de Fernando Alonso en Aston Martin, acabó décimo y capturó el último punto en juego.

Verstappen, que apunta cada vez más claramente a un tercer título seguido, lidera ahora el Mundial con 281 puntos, 110 más que su coequipero Checo Pérez y con 142 de ventaja sobre Fernando Alonso, que es tercero.

 Sin embargo, uno de los momentos más curiosos de la carrera lo protagonizó Lando Norris, una vez acabó la carrera. El piloto de McLaren se emocionó tanto en la celebración, que acabó rompiendo en pedazos de forma accidental el trofeo de campeón de Verstappen.

Es tradición para Norris celebrar su puesto en podio abriendo el champán de una forma muy particular: golpeando la botella contra el suelo o alguna superficie. Sin embargo, en esta ocasión midió mal su movimiento y la estrelló contra la mesa en la que estaba el trofeo de Max Verstappen, haciendo que el objeto cayese al suelo y se rompiese. Como está hecho de un delicado material de porcelana, saltó en pedazos nada más impactar contra el suelo.

La siguiente carrera, el Gran Premio de Bélgica, se realizará el próximo fin de semana en el circuito de Spa-Francorchamps.

La siguiente carrera, el Gran Premio de Bélgica, se disputará el próximo fin de semana en el circuito de Spa-Francorchamps.

Por qué importa: Verstappen apunta a un tercer título en forma consecutiva, tras mostrarse en pista con una gran seguridad y fortaleza que es muy difícil de hacerle competencia.